Por el Progreso //JayVik

Capítulo 3

Calor en las mejillas

La moda en Zaun se caracterizaba por su uso de colores vividos y patrones extravagantes, las rayas parecían ser la tendencia por donde mirara. Cada persona amoldaba las prendas y los retazos de tela a su propio gusto dando a cada persona un aspecto único. En Piltover, la moda se resumía en blanco y oro. No se podía negar que era bella, pero no se sentía única a diferencia de Zaun. No tenía personalidad.

Viktor aprovechó que habían pasado por una boutique para comprar algunas camisas dejando a Jayce recorrer por su cuenta los muchos estantes de prendas buscando cosas de su agrado. Su propio estilo no iba más allá de su uniforme de la academia. Nunca se centró en lo que vestía cuando de lunes a sábado llevaba lo mismo. Incluso los escasos días de descanso o llegaba a casa solo usaba ropa deportiva.

- ¿Necesitas ayuda? - le preguntó una joven mujer interceptandolo a mitad del pasillo. Vestía de forma extravagante, con tonos azules que contrastaban con su piel morena, su cabello rizado caía por un lado de su rostro lleno de mechones azul eléctrico.

- Uh, supongo que me vendría bien una ayuda - la mujer sonrió y lo jalo de la mano hacía la parte trasera de la tienda.

Del otro lado del establecimiento Viktor había terminado de elegir algunas prendas nuevas. Llevaba tiempo sin comprar nada nuevo, cada tanto arruinaba su propia ropa con sus experimentos. Incluso su actual camiseta y chaleco ya estaban bastante arruinados.

Busco con la mirada a Jayce mientras se dirigía al aparador sin una pista de él o la dueña de la tienda.

- ¿Jayce? ¿Señorita Klafor? - llamó en voz alta. Dejó su pequeña pila de ropa en el mostrador para recorrer la tienda - Jayce - volvió a llamar en voz alta.

"Aquí atrás Viktor" le gritó desde el fondo de la tienda apenas entendible por la amortiguación de las paredes. Siguió la voz de Jayce hasta una puerta entreabierta en la parte trasera donde se encontraba el taller de la señorita Klafor.

El lugar era un amplio desastre de trozos y más trozos de tela, lleno de maniquíes que portaban sus diseños. Del otro lado de la sala se encontraba Jayce junto a una mesa llena de una pila de camisas y con su propia camisa en el suelo ahora. El rostro de Viktor se sonrojó de golpe y apartó la mirada rápidamente.

- Querido Viktor - le saludó Klafor - Nunca imaginé que podrías traer a un modelo como este, oh tengo tantas ideas para vestir a este lienzo - alzó los brazos de Jayce para medirlos.

- Sigo insistiendo en que solo quiero algo simple, no quisiera arruinar sus diseños con mi trabajo - la señorita Klafor rió encantada.

- Te daré algunos atuendos mixtos, nunca se sabe la ocasión - le dio unas palmaditas a Jayce en el brazo - Por ahora necesito que modeles esto - le dio una pequeña pila de ropa.

Viktor siguió mirando brevemente la escena con el rostro caliente antes de preferir esperar afuera. Se pasó una mano por la cara tratando de disipar el creciente calor de sus mejillas.

- Vamos muchacho bonito, muestrale a Viktor como te deje - lo arrojó Klafor por la puerta.

Tropezando Jayce salió luego de unos minutos. Vestía una camisa de cuello alto pero sin mangas, hecha con varios retazos de tela que armonizaban entre ellas. Pantalones con un diseño similar y ajustados, acentuando su cintura con un cinturon de cuero y botas altas y negras con detalles metálicos.

- Para terminar creo que quería bien una chaqueta de cuero pero no me decido si de color negro, gris o café ¿Qué opinas Viktor? -

Viktor apartó nuevamente la mirada - Café - murmullo.