De compras

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Hoy es sábado, y al igual que ayer, me despierto con un tanga, pero hoy con un dolor inimaginable en los huevos, un collar de cuero rosa con una anilla, no puedo apoyar el culo en ningún lado y si fuera poco también me duele la boca, no sabía que esto de hacer mamadas te daba agujetas.

Hoy no estaremos en casa porque vamos con la universidad a Madrid a la feria de ARCOS. Tremenda cagada que caiga en sábado. Y Lola va a venir, oí como Ana y Andrea hablaban sobre ir a pedir a los profesores por si podía venir la hermana de Ana.

Me he levantado dolorido y con un tanguita, que la verdad empiezo a acostumbrarme, no sienta nada mal. Además llevando el culo así como lo llevo, lo último que quiero es un calzoncillo paseándose por todo el área rojo, así que bien. Son las 7 y el bus sale a las 8.30 desde la Uni, que son 20 min andando o 10 en bus desde casa. Voy a desayunar a ver que me encuentro hoy y si puedo hacerlo como una persona normal esta vez. Decido acercarme de rodillas no vaya a ser que me castiguen por ello, al fin y al cabo soy su cerdita.

Llego gateando a la cocina y no veo a nadie. Que raro. Me levanto, pillo mi leche y mis cereales, un bol. Abro el paquete de cereales y me echo en el bol. De repente escucho una voz saliendo de la habitación de Andrea, creo que es Lola. Y abre la puerta.

-Buenos días cerdita, como fue ayer?- dice Lola.

-Buenos días Princesa Lola, gracias por los regalos, me gustan mucho para poder serviros.-realmente me vuelvo gilipollas cuando veo a esta chica, me encanta joder.

-Qué haces de pie? Vamos vuelve al suelo que es tu sitio, deja yo te preparo el desayuno bonita.-dice con una voz muy tranquila y relajante.

Me arrodillo frente suya, lo malo es que las baldosas de la cocina tienen una textura rara con relieves de rayas que se meten en mis rodillas y duelen. Me siento como un perro, de rodillas y mis manos sobre mis muslos.

-Así que cereales eh?

Asiento con la cabeza.

Lola coge la leche y se echa un vaso, se lo bebe y lo escupe en mi bol. -Aquí tienes cerdita, tu desayuno. Toma desayuna tranquilo mientras me preparo el mío.- se agacha, pone el bol en el suelo y me acaricia la cabeza.-Por cierto te queda muy bien ese tanga fucsia.

Le sonrío y espero a que me de una cuchara o algo, aunque pienso que probablemente me diga que los cerdos no comen con cuchara y empiezo a desayunar, frente a los pies descalzos de mi querida Princesa Lola, toda la suciedad de las baldosas estas malditas que no se limpian y se me clavan en las rodillas y el bol en el suelo.

-Buenos días.-dice Ana con una ligera risa, no la veo pero la escucho y de repente alguien patea mi culo rojizo y dolorido. -Que hacéis desayunando en la cocina?

Lola le explica la situación, Ana pasa por mi lado pisándome el pie derecho y la mano, pilla sus cosas y se va al salón, Lola termina de hacerse lo suyo. Levanto la cabeza ligeramente del suelo cuando Ana sale de la cocina y veo que Lola se ha preparado exactamente lo mismo que ayer, tostadas con aguacate.

Lola entra a la habitación de Andrea y coge la correa. Me ata a ella y me dice: -Vamos al salón cerdito, deja el bol ahí luego te lo terminas.

Llegamos, se sienta en una silla y cuelga la correa en ella. Empieza a desayunar mientras yo espero ahí agachado, de rodillas, debajo de la mesa. No entiendo porque sus pies no apestan y los de Ana sí. Esta chica es genial.

Ana no para de darme patadas o molestarme con sus pies apestosos pero tengo que aguantarla para no liarla más de lo que está. Voy a intentar caerle bien, portarme y esforzarme por ella.

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⏰ Última actualización: Jul 13 ⏰

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