YO SOY EL PADRE DEL VILLANO PARTE 2

Capitulo 343 I Extra: Conociendolo

Ji Leyu se sintió aburrido.

Siempre estaba aburrido y trataba de encontrar algo de diversión.

A veces, Ji Leyu sentía que vivir era aburrido y que era mejor que muriera.

Pero cada vez que este pensamiento surgía, se obligaba a sí mismo a reprimirlo. No podía morir. Su vida la había salvado su tío, que le había herido las dos piernas. No podía morir tan fácilmente. Por lo menos, no podía suicidarse o sentiría pena por su tío.

Pero su tío había muerto y el mundo era aburrido. Vivir no era tan interesante como estar muerto.

Mientras pensaba esto, volvió a tener pensamientos suicidas.

Entonces, tan pronto como estos pensamientos surgieron, los empujó hacia abajo con fuerza sin ninguna sorpresa.

Una y otra vez, siempre fue así.

Este aburrimiento hizo que Ji Leyu se sintiera cada vez más aburrido.

Lo pensó antes de conducir el auto hacia el cementerio.

El cementerio estaba situado al sureste de la ciudad. El parque era grande y tranquilo.

Ji Leyu barrió cuidadosamente la tumba y colocó las flores que acababa de comprar frente a la lápida. Las flores eran muy hermosas, suntuosas y llenas de vida. Alegraban las fotos en blanco y negro.

Ji Leyu miró a cada uno de ellos. Desde sus padres hasta su tío, todas las personas que le gustaban, que le importaban y que no quería perder estaban enterradas allí. Todos lo abandonaron antes de tiempo. Cada año se parecía más a ellos. Se dio cuenta con mayor claridad de que el tiempo en que lo habían abandonado se estaba haciendo cada vez más largo.

Ji Leyu se sentó junto a la lápida, encendió un cigarrillo y fumó en silencio.

Mientras fumaba, recordó de nuevo que ni su padre ni su tío fumaban. 

Quizá sí fumaban, pero no delante de él.

Así que apagó el cigarrillo nuevamente.

Él siempre fue así. Siempre pretendía ser el mejor delante de sus padres y su tío, como si fuera un niño inocente como cualquier otro y sin malas intenciones.

Hasta ahora, incluso mucho después de que sus padres y su tío lo abandonaran, seguía manteniendo esa costumbre. Cada vez que iba a verlos, se comportaba como la persona más bondadosa y pura del mundo.

Ji Leyu permaneció sentado en silencio. Lo que quería decir ya lo había dicho hacía mucho tiempo y lo que quería hacer ya lo había hecho hacía mucho tiempo.

Vengó a su tío y recuperó la empresa. Incluso se vengó por completo de todos los que habían humillado a su tío y empeorado las cosas. Si hubieran sido sus padres o su tío, tal vez no les importaría o tomarían represalias. Sin embargo, estaba demasiado aburrido. No era una buena persona por naturaleza. No era una persona amable cuando estaba aburrido.

Ji Leyu volvió a recordar su infancia. Fue una infancia feliz.

La mayoría de las personas no tienen recuerdos claros de las cosas antes de los cinco o seis años. En primer lugar, se debe a sus funciones fisiológicas. En segundo lugar, a medida que crecen, las cosas que sucedieron cuando eran jóvenes se vuelven cada vez menos importantes.

Sin embargo, recordaba todo lo que había sucedido antes de cumplir cinco o seis años. Esos recuerdos no se desvanecieron como la marea baja cuando creció, sino que vivían nítidos y distantes en sus recuerdos constantes.