SIN CAFE

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- Repitelo - El hermoso rubio fue y puso su cara muy cerca de la de ese cliente.

-Eres horrible - sin miedo respondió el alto Jungkook.

Yoongi trató de separarlos, Pero a lo lejos alcanzó a ver a esa dama de la que tanto le habían hablado maravillas, siendo maltratada por un rufián.

Dejó a su amigo y al dueño de ese café, mirandose como si fueran  declarados enemigos.

El desconocido aquel trataba de tocar a Hanna, lo mas rápido que pudo caminó al momento que empuñaba sus dos pálidas y atractivas manos.

Dos pasos antes de llegar, Yoongi vio como esa dama, tomó el brazo del abusivo, la torció hasta ponerla en su espalda haciéndole tener un gran dolor, comenzó a caminar hacia afuera con el por el frente.

Con la mano desocupada tomó el café de ese cliente, ya afuera, lo soltó con rabia haciéndolo voltear para tenerlo de frente.

Después entregó el café ....

-Gracias por su compra - ella dijo fingiendo una gran sonrisa.

Después se dio la media vuelta y comenzó a caminar para volver adentro.

El cliente muy enojado la tomó del hombro, pretendía cobrarse la humillación sentida, pero no alcanzó siquiera a mover uno solo de sus cabellos.

Yoongi como todo un Héroe aprisionó con todas sus fuerzas la mano posada sobre esa bella pelirroja, y sin decir nada más, le soltó tremendo puñetazo que lo hizo caer sobre su trasero derramando el contenido del vaso en su mano sobre él mismo.

Después, preocupado por ella volteó a mirarla, ella boquiabierta miraba al cliente en el piso quejandose de estarse quemando.

*Donde estuviste toda mi vida*

Ambos dijeron a la vez. Ambos perdidos en los ojos del otro sin saber que en ese pequeño lugar con el aroma más excitante del mundo estaba por explotar una gran guerra.

-En el memento que decidas largarte y no volver, harás este negocio mucho mejor - Jimin le dijo bajito para no incomodar a los demás clientes.

-Esto es una pocilga, si vine fue por caridad a un lugar que está por morir, en cuanto abran el negocio enfrente, te aseguro que no volveré a ver tu horrible rostro, este será el primer local que veré con placer cerrar - con verdadero odio el magnate del café en serie dijo al pobre rubio que lejos de retirarse lo retó con la mirada.

-Vete ahora, - el rubio tomó de la mesa el café antes servido - mientras respiras..

La gente al rededor escuchó las palabras dichas al chico que tanto les agradaba.

Y como venganza comenzaron a lanzar los vasos ya vacíos haciéndolo huir de ahí.

En la puerta se encontró con su amigo, aún quitándose algunas servilletas mojadas de café del cabello dio un aventon a Yoongi para que despertara de su idiotez.

-Vamonos estúpido - Jungkook sumamente molesto le dijo sin importarle que el ya estaba frente a su verdadero amor.

-Su café ¿Señor? - Hanna despertó también tratando de ir por el mencionado líquido.

-No importa el café si te tengo a ti querida, dime Yoongi, o amor, cariño que se yo - enamorado respondió el pálido que siempre era rebelde y malhumorado. Gracias al negocio de Jungkook progresó tanto, su determinación, su valentía sobre nuevos retos y su obvia aportación capitalaria, pues todo eso se fue al caño al estar frente a esa mujer.

-No se preocupe joven - Jimin ya venía con su vaso en la mano - espero lo disfrute.

-Gracias, en verdad ha sido el mejor café que he tomado en mi vida - Yoongi agradeció, pero hizo reverencia a la dama.

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