Capitulo II

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Después de unas cuantas clases para Aera, se sentía mucho mejor, para la chica, era preferible mantenerse ocupada a no estarlo, la pelinegra ya se encontraba teniendo un receso de sus clases, pensando en que hacer y caminando sin rumbo alguno por los pasillos de Jooshin, el mensaje de HeRa pidiéndole que fuese por RiAn para almorzar los cuatro juntos, llegó, a lo que Aera aceptó sin mucho problema.

Con su destino ya fijo, caminó en dirección a la piscina de la escuela, pues RiAn se encontraba en su clase de natación, sus pasos firmes hicieron sonar sus botines de tacón durante todo su recorrido, entrando en el área de la piscina, RiAn dirigió su mirada a ella, sintiendo el olor de la fragancia de ella desde esa distancia.

-Aera — RiAn se acercó a ella, aún con su cuerpo mojado y su cabello soltando gotas de agua —. ¿Sucede algo? Normalmente no sueles venir aquí.

-Lo sé, pero vine por ti para ir a almorzar, HeRa me lo pidió — explicó con brevedad, sonriendo —. Por eso estoy aquí. ¿Te espero?

-Claro, no tardaré mucho. Espera aquí, Aera.

Fue así como los dos terminaron yendo hacia la sala privada que tenía el grupo de amigos, HeRa ya se había encargado de pedir toda clase de platos para disfrutar del almuerzo, y WooJin ya estaba allí, por lo que RiAn y Aera se sentaron en el mismo sofá, mientras que los otros dos estaban sentandos por separado.

-¿Terminaron por hoy? — HeRa preguntó, viendo como Aera disfrutaba de la comida.

-Si. Aera y yo ya estamos libres — respondió WooJin, pues su amiga parecía una ardilla, con sus mejillas llenas de comida, un hábito que siempre había tenido y la hacía ver tierna.

-A las cuatro. Política internacional — RiAn dijo.

Una notificación en el teléfono de WooJin hizo a este sonreír, poniéndose de pie, abandonó la sala, causando curiosidad en sus amigos —. Bueno, yo debo de irme. Le prometí a papá ayudar con algo — recordó HeRa, dejando un beso en la mejilla de Aera para luego también abandonar la habitación.

-¿También te irás y me dejarás aquí? — interrogó RiAn, con fingida tristeza.

-Obviamente — Aera asintió, soltando una pequeña risa —. No pienso quedarme mucho tiempo aquí hoy, tengo que ir a mi clase de pilates, sabes que eso es importante para mí.

-¿Recuerdas que cuando éramos pequeños me prometiste que cumplirías mis deseos? — soltó él repentinamente, sin embrago, ella asintió, mirándolo con curiosidad —. Pues tengo un deseo ahora.

-¿Cuál? — el pelinegro señaló su mejilla, indicando que quería un beso allí, sin verle algún problema, ella se acercó, lista para dejar el beso en aquella zona, pero él volteó su cara, uniendo sus labios. Abriendo sus ojos más de lo normal, Aera puso sus manos sobre los hombros de él, en un intento de alejarlo, RiAn ubicó sus manos en la cintura de ella, haciéndola acostarse en el sofá y él pudiendo inclinarse sobre ella.

Sus labios permanecieron unidos, sin haber movimiento alguno, ambos se miraron fijamente, RiAn dejó suaves caricias en la cintura de ella, empezando a mover sus labios, acción que, segundos después, fue correspondida y recibida por Aera, rodeando el cuello de él con sus brazos, dejándose llevar, disfrutando del momento, tanto como él. Ambos cambiaron de posición, RiAn se sentó, manteniendo a Aera sobre su regazo, aún sin separar sus labios por completo.

-RiAn... Estamos en la escuela... — susurró la chica entre besos, sintiendo como las manos de RiAn dejaban caricias en su cintura —. Alguien podría...

-Alguien podría vernos, y eso no me lo voy a permitir — él dijo, cortando el beso, escondió su rostro en el cuello de ella, recuperando el aliento, mientras una de sus manos bajaba hasta el muslo de la chica para apretarlo ligeramente —. Si no me recuerdas que todavía estamos en Jooshin... Hubiese continuado. Lo siento, Aera.

-Tranquilo — Aera soltó una suave risa, pasando sus dedos por el cabello de RiAn —. Lo importante fue que te detuviste. Mm, bueno, es momento de irme. Tengo cosas que hacer.

Cuando Aera intentó levantarse del regazo de RiAn, este la detuvo, agarrándola de la cadera, evitando que ella se pusiera de pie —. Un último beso y ya, te dejaré ir. Por favor — el chico abultó sus labios, rogando por un pequeño beso.

-Siempre actuando como un niño pequeño conmigo — Aera regañó con suavidad, dejando un corto beso sobre los labios de él, deshaciéndose del mohín, siendo reemplazado por una sonrisa, finalmente, RiAn dejó ir a Aera.

Aera sabía que JaeI llegaba esa noche, y si era sincera, había extrañado mucho a su amiga, ambas habían sido inseparables desde muy pequeñas, pero desde que se había ido a Estados Unidos, tomó cierta distancia de ellos, pero no de Aera, no podía h...

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Aera sabía que JaeI llegaba esa noche, y si era sincera, había extrañado mucho a su amiga, ambas habían sido inseparables desde muy pequeñas, pero desde que se había ido a Estados Unidos, tomó cierta distancia de ellos, pero no de Aera, no podía hacer algo así. Estando sentada en su tocador, lista para secarse su cabello luego de aquella ducha tan relajante, JaeI entró en la habitación con una gran sonrisa, abrazando a su amiga por detrás.

-Te extrañé mucho, Aera — expresó con cariño, sintiendo como la mencionada se daba la vuelta para corresponder al abrazo —. Veía muy eterna la llegada a tu casa.

-Mm. Pero ya estás aquí, JaeI — le recordó, ambas soltando pequeñas risas de felicidad —. Yo tambien te extrañé mucho. ¿Todo está bien, linda? ¿Has estado bien?

JaeI asintió, separándose levemente, mirándo fijamente a su amiga —. Sí, todo está bien ahora. Y si te soy sincera, deseo que así siga. En realidad, no hacía más que querer que estuvieras a mi lado, apoyándome.

-Realmente quise hacerlo, pero ya sabes, no fue posible — respondió Aera con un tono de culpabilidad.

-No te preocupes por eso ahora, lo bueno es que estamos juntas de nuevo — JaeI le aseguró —. ¿Qué tal sí nos reunimos el domingo en la tarde en la pista? Hace mucho que no lo hacemos.

-Por supuesto que sí, sabes que puedes contar conmigo para eso. RiAn no me ha dejado asistir a nada relacionado con las carreras — Aera se quejó, formando un mohín en sus labios de manera inconsciente, causándole ternura a la contraria —. Como si él no estuviera involucrado en eso también.

-Lo hace para cuidarte, lo sabes. Eres muy importante para RiAn, más aún desde la última vez que asististe y terminaste dejando a ese chico que te estaba acosando en el hospital.

-Ni me lo recuerdes, todos me miraban como si no fuesen capaces de creer que había sido yo.

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Gracias por su apoyo. Por favor, lo único que quiero pedirles es que dejen su voto y/o comentario, eso me motiva a seguir, no sean lectores fantasmas... Espero que disfruten y que les guste este capítulo.

Solo para aclarar, en esta adaptación, JaeI no estuvo, ni está involucrada de manera sentimental con RiAn.

PRETTY SAVAGE [HIERARCHY] | ᴋ. ʀɪᴀɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora