¡¿Comprometidos por Accidente?! | Satoru Gojo

Capítulo 6

Y aquí estamos, Satoru y yo en el auto de camino al restaurante, mentiría si digo que no estoy nerviosa, y lo más complicado es tratar de disimular para que él no me pregunte que me sucede, aunque estoy segura de que sabría perfectamente la razón.

Para distraer a mis pensamientos saqué mi celular y me metí a cualquier aplicación para aparentar que estoy haciendo algo en mi celular.

Pude sentir la mirada de Satoru sobre mí y eso me puso tan nerviosa, que inconscientemente entre a la aplicación de la calculadora, y empecé a hacer cálculos que ni siquiera tenían sentido para mi. Me di cuenta de lo que estaba haciendo y maldije mentalmente por ese hábito mío que hago cuando hay muchas personas a mi alrededor, y quiero aparentar que me estoy escribiendo con alguien.

Eso simplemente me puso más nerviosa, y Satoru no tardó mucho en notarlo.

–¿Sucede algo? —Pregunto mientras me miraba de reojo y nuevamente ponía su vista al frente—

"Mierda..." Maldije mentalmente.

Sin quitarle la mirada a mi celular seguía con aquellos cálculos que ni siquiera yo comprendía, le respondí de la manera más tranquila posible.

–No ¿Por qué lo preguntas? —Pregunte esta vez—

–Bueno, estas calculando varios números ¿es algo del trabajo? —Se detuvo en un semáforo en rojo y me volteo a ver—

–¿Y tú porqué estás espiándome? Podría estar en un chat privado hablando cosas PRIVADAS —Lo regañe y esta vez levanté la mirada para verlo—

–Pero no lo estabas, además me dio curiosidad el por qué tantos números, si no estás en el grupo de contabilidad —Sonrió de manera divertida—

Una vena sobresalió de mi frente y regresé mi vista a mi celular y seguí con mis cálculos.

–Eso no importa, amo los números eso es todo —Mentí, no soy fan de los números, pero estar en la calculadora me podía distraer a pasear de que las matemáticas no fueran mi fuerte, creo que ya se me hizo costumbre—

Satoru soltó una carcajada y hablo.

–Pero siempre nos dices que odias las matemáticas —Siguió riéndose. Tiene razón, pero eso qué importa ahora—

Me puse roja de la vergüenza.

–Cállate, y avanza que el semáforo ya se puso en verde —Cambie el tema. Apague mi celular y gire mi cabeza para ver a través de la ventana—

Saturo dejó de reír, pero aún seguía con una sonrisa juguetona, y avanzó. Mentalmente estaba pidiéndole a Dios que llegáramos rápido.

Durante el camino ambos nos quedamos en silencio, pero ahora ya no me sentía tan nerviosa, esta vez estaba tan distraída viendo a través de la ventana del carro que se me olvidó por un instante lo que sucedió en el estacionamiento de la empresa.

Satoru no volvió a hablar en el transcurso del camino, lo que fue raro porque siempre está hablando y diciendo chistes muy tontos, pero esta vez no me importo, realmente estaba agradecida de que ya no haya hablado más en el camino.

Llegamos al dichoso restaurante, y Satoru estaciono el carro en el estacionamiento que ofrecía dicho restaurante, ambos bajamos del carro, y nos adentramos en el lugar. Con la mirada empecé a buscar a los chicos, y los encontré en una mesa que estaba no tan al fondo del restaurante. Nos acercamos y Shoko me miro confundida.

–Hola —Saludé y me senté al lado de Shoko—

–Hola... creí que no sabías donde estaba Satoru —Me dijo en un tono audible solo para mí—