Vampire Knight: La herencia

Capítulo 8 : La sed de Kaname

~Dormitorios de clase nocturna~
 
 
Una sensación de ardor le llenó la garganta, toda la humedad desapareció mientras una sensación seca y desgarrada se apoderaba del interior. Kuran dejó que su mano se levantara para masajearse la garganta en un intento de aliviar el dolor... pero fracasó miserablemente. Dejando escapar un profundo suspiro, se levanta y se baja de la cama para ir a buscar algo de beber. Pasando las manos por los estantes, saca las tabletas de sangre artificial y las pone en una taza de agua.

Las pastillas se desintegran al instante, dejando un líquido rojo intenso, del color del vino tinto intenso. Se lo traga, se sacude los labios, se lame el exceso y vuelve a la cama... Pero no se detiene, abre los ojos de nuevo y mueve el cuerpo para sentarse, con la mano en la garganta una vez más mientras sigue masajeándola.

Sus ojos se oscurecen a medida que la sed de sangre lo acosa, el hecho de que esté a punto de atravesar algo lo confunde mucho. "¿Por qué sigo teniendo sed?", se preguntó, pensando en qué hacer con el problema cuando, de repente, la imagen de cierta persona apareció en su cabeza. El chico se sometía a él como lo hizo en la puerta, hundiendo los dientes en la piel de los demás mientras jadeaban.
Con los ojos entrecerrados al ver realizada su fantasía, la rechaza y se da la vuelta hacia el otro lado de la cama. "Este va a ser un día muy largo...", anunció con desagrado.
 
~ TURNOS DE CLASES NOCTURNAS~
 
 
Mientras Kaname pasaba, notó que Yori y Zero retenían a las chicas, sus ojos recorrieron la delgada figura de cabeza plateada antes de alejarse. Desde ese suceso en su habitación, ha estado evitando al chico. Y considerando el hecho de que su hambre ha ido empeorando, ha sido una buena idea. Si estuviera cerca del adolescente durante demasiado tiempo, probablemente terminaría mordiéndolo, si no más, y eso no es bueno. Estos extraños deseos no tenían sentido para él, y realmente necesita poner las cosas en orden.

Lavanda se acercó al hombre que lo acababa de revisar, su expresión parecía un poco más agitada y preocupada. Kuran supo que algo malo estaba por venir solo por la expresión del rostro del chico, así que miró hacia otro lado. Mala idea.

Esta acción enfureció al chico plateado, el chico apretó el puño. (¡Este asno ya ha ido demasiado lejos! Lo mínimo que podía hacer era disculparse.) Discutió listo para atacar al macho cuando otro proceso de pensamiento interrumpió al primero. (¿Por qué? ¿Casi hacerte 'algo'? ¿O por no continuar con ese algo?) cuestionó su voz interior y sintió que su rostro se calentaba, forzando rápidamente la idea y el pensamiento a alejarse.

—Voy a embestir ese culo. —Dejó de caminar hacia el moreno y lo vio alejarse—. Oh, no, no lo harás —anunció, agarrando la manga de Kuran y haciendo que el hombre lo mirara—. ¿Vas a explicarme este juego de las escondidas tuyo o voy a tener que obligarte a ti también? —cuestionó Zero, su ira se apagó cuando notó la tensión en el rostro del hombre, el dolor demasiado evidente.

Se preocupó un poco por cuestionarlo cuando Kaname lo empujó. "Me ocuparé de ti más tarde", habló con dureza y Kiryu espetó. "¿Por qué no dices NUNCA? Es gracioso cómo te ofreciste a enseñarme y hablar conmigo, pero aún así estás siendo un completo idiota y me evitas. ¿Qué pasa?" Instigó a tirar del brazo del hombre nuevamente, todos lo estaban mirando ahora, pero a él no le importaba una mierda, apretando el puño con rabia.
Kaname chasqueó la lengua y se encogió de hombros, continuando su caminata.

"¡PANSIE!", gritó el hombre que se había quedado atrás a todo pulmón antes de darse la vuelta y marcharse, dejando a todos confundidos. Pero Kaname, por otro lado, estaba al borde de su punto de quiebre. En más de un sentido.
 
~ En clase~
 
Kuran ni siquiera prestaba atención a la clase, su mente estaba completamente concentrada en algo  que no  era apropiado para la escuela; y todo involucraba a una persona, con múltiples problemas.