Ambos miraban incrédulos al híbrido de oso blanco frente suyo ¿En que estaba pensando? ¿Ponerlos a hacer una misión juntos? Estaba delirando.
Cucurucho sabía perfectamente la idea de Doied y ElQuackity de acabar con sus gemelos y tomar su lugar, ya que ellos pudieron tener lo que ellos no, aparte de que gracias a eso podrían engañar a los demás residentes de la gran isla, así que harían dos trabajos al mismo tiempo.
Entonces su mente -Ocupada en sus propios asuntos, mucho más importantes que los caprichos de los dos chicos- al escucharlos día, tras día, tras día pelear e insultarse porque no pueden salir al mismo tiempo a espiar ya que sería más que evidente, porque tampoco se pueden hacer pasar por los conejos -ya que antes podían hacerse pasar por los trabajadores, pero ahora es diferente y todo su plan se pudrió- hizo que por la poca paciencia que le quedaba los pusiera juntos en esa misión, que trabajaran en equipo si querían alcanzar su cometido.
¿Problema? No se llevaban para nada bien. Para Doied, "Quacki" (o así lo llamaban todos) era demasiado inmaduro, enojon y quejumbroso, no soportaba escucharlo quejarse, quejarse y quejarse de cualquier cosa, aparte que le parecía algo tonto para algunas cosas, aunque no puede negar de que es bastante ágil y astuto para ciertas cosas.
Y para Quacki, odia simplemente su existir, claro, debe admitir que es super inteligente, pero le irrita que lo corrija en todo, que busque hacer todo él, no puede soportar la presencia de ese tipo.
Pero no pueden hacer más que hacerle caso a Cucurucho, ya que saben el tipo de castigo que les pueden dar y eso es lo que menos quieren.
El oso después de darles la orden se despidió deseándoles buena mañana, el azabache rodó los ojos y metió sus manos en los bolsillos de su peto, inclinándose lentamente de atrás hacia adelante frunciendo el ceño, no quería trabajar con el tipo que aborrecia.
—Deja de hacer pucheritos, no creas que yo estoy feliz de tener que trabajar contigo— habló el de lentes con ese típico tono de voz que tanto lo irritaba. Se levantó a regañadientes de la silla y pasó a su lado golpeando con intención su hombro.
El castaño lo miró mal y bufó molesto, odiaba su forma tan infantil e inmadura de actuar, pero no había nada más que hacer, si quería atrapar a su hermano tendría que trabajar con Quacki.
Ambos tomaron caminos diferentes, pero fueron detenidos por dos de los trabajadores de La Federación que les tenían una noticia de último minuto en nombre de Cucurucho y su otro jefe.
Estaba harto de escuchar al pelinegro hablar de lo estúpido que era ponerlos juntos a hacer más cosas de la misión que ya iban a hacer.
Los habían mandado a hacer varias "misiones" juntos para empezar con su aprendizaje de "convivencia" sana antes de hacer cualquier cosa antentando ante Quackity y Roier, no les iban a dar permiso de hacer ninguna jugada si no les demostraban a todos que podían estár juntos sin pelear.
Iban a ser pocos días, según los trabajadores que los hicieron metidos en esa habitación donde tenían que escribir información de cosas que realmente no le interesaban, estaba concentrado en buscar una manera de cerrarle la boca al mayor.
La tarea para hacerlos empezar con su aprendizaje no estaba funcionando mucho que digamos.
El azabache se quejaba y se quejaba de todo, lo insultaba y por veces lo empujaba haciendo que lo que sea que estaba haciendo se le descontrolara, ni siquiera le estaba ayudando, estaba siendo más insoportable de lo normal y sinceramente su paciencia ahora era nula.
—Te callas o te callo, es enserió— advirtió golpeando el lapicero contra la mesa, que no sabe como pero gracias al cielo que no se rompió de la fuerza que implantó en el golpe. Miró con una sonrisa malevola al contrario, el pelinegro lo miró de vuelta y sonrió con burla, él solo suspiró pasando sus dedos por el puente de su nariz tratando de aliviar el dolor de cabeza que estaba sintiendo en estos momentos.
—Estamos juntos en esto, más vale que te comportes si no quieres que el jefe nos mande directo al agua ¡Actúa como un adulto por un minuto!— alzó la voz mirando en su dirección nuevamente, el mayor se encogió de hombros restandole importancia, apretó con más fuerza el bolígrafo, «Son pocos días, son pocos días, son pocos días» pensó tratando de calmar las ganas de estamparle un golpe en toda la cara.
Como por décima vez suspiró y siguió en lo suyo, sintiendo una paz al no escuchar al oji-marron parloteando como loro por más de diez segundos.
Poco duró su gran armonía cuando escuchó un vidrio romperse, se giró rápido viendo al pelinegro mirar al suelo apretando los dientes, miró a donde estaba observando y vio uno de los frascos de la mesa roto, estaba seguro que lo mataría.
Pero ahora no tenía las fuerzas para pelear con él, después se desahogaria con el espejo. Se hincó y empezó a tomar con cuidado los trozos de vidrio roto, miró a los lados buscando una bolsa cuando escuchó algo a su aldo, miró y vio al de overol sosteniendo una bolsa. Sonrió arrogante y empezó a meter los pedazos.
Luego se levantaron y siguieron en el suyo, aunque se aprovechó de molestar al mayor por haberlo ayudado cuando nunca lo hacía, sus respuestas eran solo muecas y gruñidos, se reía escandalosamente en su cara ante las "respuestas".
[. . .]
Al final Quacki si lo ayudó, poco, pero le dio una mano y después de horas entregaron lo que Cucurucho los mandó a hacer. Su tarea era hacerle tareas a los pueblerinos, sin ser tan bruscos con las peticiones.
El oso examinó la libreta con las tareas detenidamente, asintió con la cabeza y les dijo que su trabajo estaba perfecto, pero eso no les daba aún la oportunidad de hacer su cometido, es obvio que más de uno escuchó sus gritos y peleas, por lo que necesitarían más tiempo de calidad como compañeros.
Ambos suspiraron con cansancio y asintieron como adolescentes regañados por su madre. Se dieron media vuelta caminando a sus propias habitaciones que quedaban al otro lado de las instalaciones principales.
—Para la próxima me puedes ayudar un poco más, digo yo— habló por fin después de un silencio, el pato soltó una risa nasal. —Ajá, mejor esperemos a la próxima tarea, capaz después el inútil sea alguien más— el castaño frunció el ceño ante su respuesta.
—¡Nunca te dije inútil!— Gritó molesto, el otro se volteó caminando hacia atrás rodando los ojos —Eso insinuaste— un quejido cansado salio del otro, simplemente se dio por vencido, estaba hasta el tope de tanto discutir con él.
Aceleró el paso logrando caminar adelante de él —Si no quieres que nos cancelen los planes, intenta tolerarme un poco, no quiero ser el único intentando eso— pidió agarrando paso para otro lado, el pelinegro lo miró irse y suspiró, tal vez intentaría no insultarlo tanto... no prometía nada.
Va, primer cap y no me gustó, pero hay que tener fe 💔
Algo que no es el mismo ship de siempre, yei 🦅‼️
Bueno, cualquier error o sugerencia que tengan me dicen :3
Atte: Gabritikkis
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Eres Insoportable || Q!ElQuackity x Q!Doied
FanfictionNo se llevan bien, pero tener el mismo objetivo los va a llevar a tener que cumplir tareas para tener una buena convivencia juntos y que les den el permiso de hacer su cometido. 《!...♡...!》 Antes de leer: -Enemies to lovers - NO enviar a los stream...