EL MISTERIO DE LA TABERNA: CONFESION DE UNA PERSEGUIDORA

CAP 6

ANTERIORMENTE...

- ¿ñê¢ê§ï†åñ 奵Ðå?, ¿qµïêrêñ qµê ₥ê vå¥å?, ¿ïñ†êñ†åñ ¢ð₥µñï¢år§ê? - eran preguntas comunes a modo de entender sus necesidades.

- Y̸o̷ ̶s̵i̴ ̷n̷e̵c̴e̵s̷i̶t̸o̸ ̸a̴y̶u̵d̸a̷,̷ ̷s̶e̷ñ̴o̵r̵i̵t̷a̸ ̶R̶o̷x̷a̷n̷n̶e̴ - el escuchar esa voz, supe que no estábamos solos, volteé- q̷u̷e̷ ̸g̵u̴s̷t̶o̵ ̸c̵o̵n̵o̴c̷e̸r̸o̵s̴ ̶a̴l̷ ̷f̶i̶n̸,̵ ̴f̸e̶l̸i̸z̵ ̸c̷u̷m̶p̵l̸e̷a̷ñ̷o̷s̸....

(espacio para mencionar que las letras distorsionadas son por un cambio de lengua desconocido, Ahora estos personajes al entenderse no habrá necesidad de incluirlas, gracias)

- ¿Quién eres y como sabes mi nombre? - indague, el solo rio y empezó a caminar en lo que iba tocando los objetos de las mesillas decorativas, dándome la espalda e ignorándome por completo - oye deja eso ahí, los anfitriones se pueden enojar, ¿me estas escuchando? - al parecer no, cuando intente acercarme y encararlo, rápidamente se giró con intención de tomarme del brazo, logre esquivarlo con rapidez, benditos sean los reflejos de un gato.

- Eres ágil, me sorprende, pero veras, no he venido a perder el tiempo- dicho esto se abalanza contra mí, intentando atraparme, esquivaba cada uno de sus torpes intentos, allí lo analice mejor, a pesar de mostrarse amenazante y siniestro, su aura dejaba ver su debilidad.

- ¿A qué se debe todo esto?, ¿Quién eres? - seguía sin responder, ya me estaba enojando, así que, por mi seguridad y la tranquilidad de los que residen aquí, decidí enfrentarlo, ahora si a los golpes, uno tras otro y como podía esquivaba los suyos, hasta que, gracias a una distracción, di mi último golpe al cual fue suficiente como para dejarlo en el suelo.

- Te subestime demasiado- contesto al fin.

- Siempre lo hacen, ahora ¿si vas a responder? - negó con un sonrisa pícara- mira no tengo toda la noche- en eso decidí ir por un recurso drástico, pero efectivo en estos casos, runas de expulsión, creadas a partir de un conjunto de magia negra. Estaba a punto de enviarlo a su plano, cuando de repente veo que se levanta y como si de un truco de magia se tratase, detrás suyo apareció- ¿Owen?

No respondía, solo cayó al suelo, estaba lleno de heridas y maleza en su ropa, me asuste pensando de que tal vez se encontrara sin vida, me fijaba en su respiración y por suerte si tenía.

- No atacaras con un humano presente, ¿verdad? - no sé cómo hizo para traerlo hasta aquí, pero debo admitir que fue muy astuto de su parte- las entidades como tú tienen un código moral, no dañar a ningún inocente- replico- este chico no tiene la más mínima idea de que hace aquí, o mejor, por qué tu estas aquí- hijo de-

- ¿Qué pretendes? - mi paciencia tiene un límite y esta persona ya estaba llegando a extremos.

- Se que tú tienes idea de que está pasando, ¿supongo? - contesto.

- Es correcto, esto apareció en una de las probabilidades a partir de la decisión tomada por el clan, al incluir a esa chica, sabía que traería muchos problemas a futuro- seguí- solo estaba esperando la más mínima oportunidad- en eso analizaba mi espacio y cada movimiento a seguir, planee mi próxima jugada, sacar a Owen de aquí y ponerlo a salvo, estaba a punto de ejecutarlo, cuando una voz llamo mi atención.

- Ro-Roxy ¿e-eres tú? - era Owen, estaba aún somnoliento, su voz se escuchaba débil y sin energías, me enoje aún más- a-ayúdame por favor.

- Le quitaste su energía, es un humano, ¡¿cómo se te ocurre?¡- le reclame, como me jode que se aprovechen de los más indefensos.

- Tú le hiciste lo mismo a Andy en el bosque, así que tu reclamo es algo hipócrita- contesto, que cínico.