Only bought this dress so you could take it off Take it off Carve your name into my bedpost 'Cause I don't want you like a best friend Only bought this dress so you could take it off Take it off
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Ari POV
Vergüenza. Eso es lo que debería sentir, pero me va a matar, lo juro. Lleva horas torturándome, desde que llegamos al estadio no a hecho más que pasearse frente a mí, meneando sus caderas con esa falda jodidamente corta que deja a la vista sus níveas piernas. Mi intimidad se contrae cada que pasa frente a mí o cuando simplemente habla y me mira. Esa ropa hace resaltar tanto su cuerpo, sobretodo sus piernas, Dios. Sé que está hablando, puedo verla mover sus labios y hacer amagues con sus manos para intentar expresarse mejor, pero mi mente está en otro lado, simplemente no puedo parar de pensar en lo bien que sienta esa ropa.
Ambas estamos en la pequeña habitación de comida que tiene cada camerino, la puerta está cerrada y ella está de pie frente a mí, pues yo estoy sentada en uno de los bancos que tiene la habitación, viéndome mil veces más pequeña que ella, mi cara está a la altura de sus pechos genuinamente descubiertos ante aquel top blanco que la ayude a escoger, sabía que se le vería bien, pero, ¿tanto? Dios.
—¡Chingados, Ari!— Me saca de mis pensamientos dándome un golpe en el hombro, haciendo que rápidamente me gire a verla con el ceño fruncido, colocando una de mis manos sobre donde golpeó.
—¡Heyy!— Me quejo mientras sobo mi hombro y la miro mal. —¿Qué te pasa, niña?— Ahora su mano aleja la mía de mi hombro de un solo manotazo, y su otra mano toma lugar donde antes estaba la mía.
—No me estabas poniendo atención.— Se queja, dejando caricias suaves sobre mi hombro desnudo, pues ya tenía la experiencia del calor que suele hacer en los estadios, entonces preferirí usar algo fresco, un top negro que iba a juego con mi falda.
—Si lo hacía.— Me defiendo sin alejar su mano, reteniendo un suspiro cuando comienza a alargar el roce de su mano hasta un poco más abajo de mi brazo, por inercia bajo la cabeza, incapaz de mantenerle la mirada por más tiempo.
Ella suelta una risa que me es dificil escuchar, y con su mano libre alza mi mentón para que la mire a los ojos, sonriendo gentilmente, algo un tanto raro en ella, antes de hablar.
—¿Estás nerviosa por la pelea?— Cuestiona mirándome fijamente con un gesto tan tierno que podría lanzarme a besarla.
No.
—Si.— Miento y extiendo mis brazos para enredarlos alrededor de su cuerpo, acercándola a mí, al punto en el que está casi sobre mi regazo. —¿Y si le pasa algo?— Murmuro sobre su oído, sintiendo su cuerpo estremecerse en mis brazos, y nuevamente bajo la mirada antes de que ella vuelva a mirarme.
—Hey, no. ¿Por qué piensas eso?— Su voz sale en susurros, y sus brazos se apoyan a los lados del banco, rodeándome en este. Alejo mis brazos de su espalda, arrastrando mis manos por sobre su ropa hasta llegar al borde de la parte superior de su traje, deslizándolas hasta meterlas por debajo de este, dejándolas sobre el top blanco que lleva puesto. La situación es comprometedora desde cualquier perspectiva, sus brazos me arrinconan contra el pequeño banco, nuestros cuerpos están increíblemente cerca, y mis manos tocan descaradamente por sobre su top. —Ari.— Susurra, y es hasta ese momento en que alzo la mirada.
