Compáses Opuestos

Capítulo 1

El peor primer día.

Olivia.

—Prefiero volver a lesionarme la rodilla antes que bailar con ella. —Dije enojada mirando a la chica de ojos grises que me miraba sin expresión alguna. —Maestra Nowak, usted misma dijo que una pareja de baile necesitaba tener química y la única química que tenemos es una radioactiva. —La mujer mayor empezó a reír.

—Vamos, Olivia. Deberías darle una oportunidad a Nadia.

—¡Ella empezó! —Reclamé.

—En verdad eres un dolor en el culo. Ahora entiendo porque nadie quiere ser tu pareja. —Nadia soltó un suspiro y yo me resistí a aventarle la botella de agua de la maestra, aunque podría ser considerado como una venganza luego de que un solo día me haya mojado dos veces y no se haya disculpado ni una sola vez.

La maestra Nowak debía de estar loca si pensaba que yo aceptaría bailar con una persona tan desagradable como Nadia Harper.

⌚️Seis horas antes.⌚️

Jugaba con mis manos algo nerviosa, el volver a la universidad luego de mi pequeño receso era algo que hacía que mi corazón latiera rápidamente. Solo habían sido tres meses fuera por mi rodilla, pero había sentido que mi recuperación fue una eternidad. Pero debía admitir que me sirvió para tener un poco más de energías, no recordaba la última vez que me había tomado un descanso tan largo.

—Pareciera que estuvieras a punto de vomitar. —Miré a Chloe quien parecía divertida. —Deberías relajarte, creo que el metro ya está lo suficiente sucio esta mañana como para que vomites.

—No voy a vomitar. Solo estoy nerviosa, volver a la universidad me hace sentir como si fuera mi primer día.

—Piénsalo como si solo volvieras de unas vacaciones, te aseguro que será un gran día para ti. —Agradecí que Chloe estudiara en el departamento de artes y me pudiera acompañar cada mañana a la universidad. Ella hasta se aseguraba de garantizar que despertara por las mañanas, era una gran amiga. —Si no, siempre podemos buscar un bar.

—Ahora que volví a la universidad volveré a mi régimen sin alcohol.

—Dios, extrañaré tanto a mi quería Olivia borracha. —Ella apoyó su cabeza en mi hombro. —Solo vivirá en mis recuerdos las veces que hablabas como una boba porque no eras capaz de articular una frase coherente. —Me sentí avergonzada.

—No soy tan así.

—Eres pésima manejando el alcohol.

—Lo bueno es que siempre te tengo cerca, por eso me confío bastante.

—Bueno, mientras este cerca todo estará bien. —Noté una sonrisa en su rostro y eso me hizo sentir más cómoda, supuse que hoy si sería un buen primer día.

Al salir del metro la lluvia nos volvió a encontrar, estábamos esperando que la luz del semáforo cambiara para poder cruzar a la universidad, pero un imbécil en una moto pasó rápidamente salpicándome agua en el pantalón. Chloe iba a perseguirle, pero la detuve, al menos siempre los días de lluvia venia con un cambio de ropa. Era parte de vivir en una ciudad tan fría como Nueva York, y me refería a una frialdad en muchos sentidos.

—¿Estás segura de estar bien? —Chloe volvió a preguntar mientras arreglaba mis nuevos pantalones en el baño.

—Si, tranquila. No es primera vez que me pasa algo así, a veces pienso que la desgracia me persigue. —Al salir del baño noté como una chica alta pasó a nuestro lado, pero lo que me llamó la atención fue la chaqueta mojada y el casco negro que llevaba en su mano. No quise decir nada al pensar en que reconocí su chaqueta porque quería evitar problemas, Chloe solía reaccionar rápidamente a estas cosas y la verdad, prefería llevar un primer día tranquilo. —¿No tienes una clase a la que ir?