Muero Por Vos//Trueno

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Yo soy un wacho atrevido, mai'

Mateo

Deslizaba el boli sobre la mesa, mirando fijamente los dibujos que estaba haciendo sobre la madera.
No le gustaba el instituto, le aburría demasiado, le parecía un suplicio tener que estar sentado allí escuchando cosas que no le interesaban para nada.
Decide dejar el boli sobre la mesa y recostarse en el respaldo de la silla, mira al profesor el cual está completamente enfocado en copiar cosas en la pizarra.
Entonces alguien interrumpe la clase tocando a la puerta, puede ver como la cara del señor Ramírez se vuelve en una cara de desagrado y no puede evitar reírse.

- Pase - dice el profesor. Al abrirse la puerta se puede ver al director el cual le hace un gesto al señor Ramírez para que salga - un momento, enseguida vuelvo.

No pasa mucho tiempo cuando el señor Ramírez entra con una chica a la clase, con el pelo rubio liso y unos ojos marrones grandes, la chica evita mirar en todo momento a la clase, simplemente se limita a mirar al suelo o al señor Ramírez.

- Bueno chicos, esta es Marta, viene de España y se va a quedar con nosotros este curso - anuncia. Se queda mirando a la chica y está por fin decide sonreír con amabilidad y preguntar donde se tenía que sentar - pues detras de Palacios hay un sitio libre, te sentaras allí por ahora - ella profesor le señala el sitio, ella asiente y se hacerca a el sin mirarlo mucho a la cara - bien, ahora continuemos, Palacios, explíquele a Marta lo que estamos dando para que se pueda poner al corriente cuanto antes - el asiente con la cabeza y se queda mirando a la chica con curiosidad, ¿piensa hablar en algún momento?

- Amm, hola - dice ella y Mateo se da la vuelta para recostarse en la pared. Al verla de cerca se puede percatar de las pequeñas pecas que hay salpicadas por todo su rostro, tiene los labios carnosos y un pequeño arito en la nariz, era muy linda - ¿me puedes pasar lo que lleváis hecho?

- Pues si te soy sincero, no hice ni mierda wacha - ella sonríe un poco y el se extraña - ¿que te reís?

- No, nada - dice , pero él le insiste otra vez

- Decime

- Es que me hace gracia el acento, nada más - dice ella sonriendo, él esboza una pequeña sonrisa y niega con la cabeza

- Pensé que ibas a decir algo menos básico, pero ya veo que sos una turra simple - ella levanta una ceja y se da la vuelta para coger algo de la mochila - para no, no te ofendas

- No me ofendo, es que no se que quieres que te responda - dice sin mirarlo a la cara

- No se, podes presentarte mínimo

- Marta, encantada- dice ella

- Podrías ser más agradable wacha - ella suspira y el se queda mirandola, sus ojos eran de un marrón claro muy bonito - Mateo, un gusto. Y decime, ¿qué haces acá? ¿Porqué viniste tan lejos?

- Mis padres se querían mudar y por algún motivo decidieron venir aquí

- ¿De qué barrio sos?

- De la boca, ¿y tu?

- Del mismo wacha, va a resultar que somos vecinos. ¿Y no tenés amigos?

- Si bueno, un par de ellos pero no muy íntimos, todavía no me a dado tiempo de conocer a nadie - se fija en como va vestida la chica, unos vaqueros y una sudadera

- Bueno mirá, ya tenes uno - la chica sonríe provocando que el chico también lo haga - ¿querés quedar después de clases?

- Ammm, pues no se, supongo