Luciale.
Sus huesudos dedos se ciernen sobre mi garganta, ejercen la suficiente presión como para arrebatarme el aliento y no permitir que el oxígeno viaje por esa zona. Mi respiración se entrecorta, los latidos de mi corazón se oyen más fuertes dentro de mi pecho y ella puede oírlos.
No puedo moverme, la rigidez avanza por mi cuerpo y se apodera de él. Un dolor indescriptible atraviesa mis extremidades como si fueran quebradas, mientras que la mirada oscura de Shaperi no se aparta de mí rostro, con intenciones de evaluar mi reacción ante el dolor, y una tenue sonrisa burlona se esboza en sus labios rojos al clavar sus afiladas uñas en mi piel.
—La gran y temida Luciale Meire —susurra con sorna, su frío aliento roza mi nariz—. Aquella que ocupó un lugar que jamás le perteneció y que está haciendo los mismos actos que me condenaron a ser despojada de mis títulos. ¿Por qué ese trato tan desigual de parte de la Diosa Skara? Ekaterina tiene preferidas, es obvio. ¿Qué piensas tú, Sheneira?
Mi visión se torna borrosa conforme transcurren los minutos, no logro respirar lo suficiente como para pensar, mi garganta está cerrada tras la fuerza que ejercen sus manos sobre mi cuello. Es la misma sensación que sentí cuando alguien manipuló el cuerpo de Rowan para dañarme esa noche, y juraría que ha sido ella.
La misma quemazón, el mismo ardor, la acidez que atacaba mi estómago, la rigidez en el cuerpo y el dolor como si se tratara de mil pinchazos en los huesos. Fue Shaperi la que irrumpió en el espacio mental de mi esposa y usurpó su cuerpo por unos minutos.
Es ella quién atormenta a mi familia y la primera que mataré de todos ellos, si es que no acaba conmigo antes.
Un ruido ensordecedor invade la habitación, Shaperi cubre sus oídos irritada por ese sonido que solo podemos oír nosotras tres. Ella, mi esposa y yo. Cae al suelo, aún asustada por lo duro que debe ser perder el sentido de la audición tras un hechizo hecho por una ninfa del sol.
Shaperi no tiene debilidades físicas, pero sí mentales. En todos los libros de la historia de Lilium se menciona que a ella le aterraban los legendarios y las ninfas del sol, y que se transformaron en la única especie que podía atacarla sin inconvenientes. Cualquier hechizo de las ninfas del sol dónde utilizaran ruidos fuertes para romper sus tímpanos, es lo único que se necesita para destruir sus apariciones de manera temporal.
Durante sus años como diosa, se encargaba de atormentar a aquellas personas que cumplieran las características que ella no poseía. Se aparecía ante los más jóvenes, los más intrépidos, los más poderosos, los más amados, los más nobles, para romper la poca fe que tenían en vivir una vida feliz. Fue uno de los tantos motivos por los que la Diosa Skara la destituyó y la desterró.
Un haz de luz rodea su silueta paraliza y se desvanece, deja una estela de polvo azabache brillante a su paso.
Recupero en pocos segundos el control sobre mi cuerpo y me ocupo en respirar con rapidez, trato de normalizar mis latidos y mis inspiraciones. Sin embargo, me es imposible en estos instantes. El miedo aterroriza a cada parte de mí con sus pensamientos intrusivos, con las preguntas respecto a que tan protegidas están mi esposa y mis hijas. Si la Diosa Antigua y Olvidada de Shaperi logró herirme de manera física, ¿Qué tan fuerte soy?¿Por qué mis habilidades no actuaron en su contra?
—Lu... Mi amor —se sienta Tree a mi lado, sus ojos cafés revisan mis extremidades para comprobar que no tengo heridas sangrantes o algo por el estilo, más allá de los moretones oscuros que habrán quedado en mi cuello. Sus manos acunan mi rostro con delicadeza, noto la preocupación en sus expresiones y en su bella mirada café—. Ya no está, ¿Si? No puede contra mí.
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Lúgubre Alma [2. Saga Divina Inmortalidad]
Fantasy× Para entender mejor esta historia, puedes leer Siniestra Nebulosa antes si así lo deseas × Han pasado diez años desde que Luciale fue liberada de la maldición que la condenaba a una vida llena de desgracias. También significan diez años desde la...