Acabaré Contigo: Lumelia

Capítulo 3: Primer día de clases.

«Pov Lucía»

Era lunes, primer día en la U, y no tengo ni idea de lo que haré. Amelia me dio un calendario de clases. La primera clase es de matemáticas.

Cuando llegue al salón no había casi nadie, excepto por una chica de cabello oscuro y lentes y un chico moreno con gorra que hablaban ahí.

Según entendí, podía sentarme en donde yo quisiera, así que me senté hasta atrás.

No se porque, pero los chicos se me quedaron viendo.

Cuando pude ver la chica se estaba acercando a mi. Ahora que la veo bien, tiene el pelo como que raro, no lo se. Parece Goku de Dragon Ball.

-𝐻𝑜𝑙𝑎. -saludo la chica.

-𝐻𝑜𝑙𝑎. -le devolví el saludo.

-𝑆𝑖 𝑠𝑎𝑏𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑒𝑠 𝑒𝑠𝑒 𝑙𝑢𝑔𝑎𝑟 ¿𝑛𝑜?

-𝑈ℎ𝑚, ¿𝑒𝑠𝑡𝑒? 𝑆𝑒𝑔𝑢́𝑛 𝑦𝑜, 𝑑𝑒 𝑛𝑎𝑑𝑖𝑒. -no lo se pero okey. Ni siquiera sabía que este lugar estaba ocupado.

-𝑂ℎ 𝑛𝑜. -su tono de voz se escuchaba preocupado-. 𝐸𝑠𝑒 𝑎𝑠𝑖𝑒𝑛𝑡𝑜, 𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝐴𝑚𝑒𝑙𝑖𝑎 𝐵𝑙𝑖𝑔ℎ𝑡. 𝑇𝑒 𝑗𝑢𝑟𝑎𝑟𝑖́𝑎 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑜𝑑𝑟𝑖́𝑎 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑟𝑢𝑖𝑟𝑡𝑒 𝑠𝑖 𝑡𝑒 𝑣𝑒 𝑎ℎ𝑖́ 𝑠𝑒𝑛𝑡𝑎𝑑𝑎.

-𝑃𝑢𝑒𝑠 𝑒𝑠 ℎ𝑜𝑟𝑎 𝑑𝑒 𝑞𝑢𝑒 𝑎𝑙𝑔𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑝𝑜𝑛𝑔𝑎 𝑒𝑛 𝑠𝑢 𝑙𝑢𝑔𝑎𝑟 𝑎 𝑒𝑠𝑎 𝑒𝑛𝑔𝑟𝑒𝑖́𝑑𝑎. 𝑌 𝑒𝑠𝑎 𝑣𝑜𝑦 𝑎 𝑠𝑒𝑟 𝑦𝑜. -use un tono de voz seguro de mi misma.

-𝑂𝑦𝑒, 𝑛𝑜 𝑒𝑠 𝑝𝑜𝑟𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑝𝑟𝑒𝑜𝑐𝑢𝑝𝑒. 𝑃𝑒𝑟𝑜, 𝑛𝑜 𝑞𝑢𝑒𝑟𝑒𝑚𝑜𝑠 𝑎 𝑜𝑡𝑟𝑜 𝑎𝑙𝑢𝑚𝑛𝑜 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝐻𝑜𝑠𝑝𝑖𝑡𝑎𝑙. -lo último lo dijo casi susurrando. Cuando pude notar, Amelia se acercaba e hizo una cara de disgusto al verme.

-𝑄𝑢𝑖𝑡𝑎𝑡𝑒. -me saludó.

-¿𝑄𝑢𝑒 𝑑𝑖𝑗𝑖𝑠𝑡𝑒? 𝐸𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑜 𝑒𝑠𝑐𝑢𝑐ℎ𝑜 𝑎 𝑐ℎ𝑖𝑐𝑎𝑠 𝑒𝑛𝑔𝑟𝑒𝑖́𝑑𝑎𝑠 𝑦 𝑚𝑒𝑛𝑜𝑠 𝑎 𝑙𝑜𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑚𝑒 𝑐𝑎𝑒𝑛 𝑚𝑎𝑙. -le devolví el saludo-. 𝑌 𝑏𝑢𝑒𝑛𝑜𝑠 𝑑𝑖́𝑎𝑠 𝑎 𝑡𝑖 𝑡𝑎𝑚𝑏𝑖𝑒́𝑛, 𝐵𝑙𝑖𝑔ℎ𝑡.

-𝑄𝑢𝑖𝑡𝑎𝑡𝑒 𝑜 𝑡𝑒 𝑞𝑢𝑖𝑡𝑜 𝑎 𝑙𝑎 𝑓𝑢𝑒𝑟𝑧𝑎. -empezó a arrugar las cejas.

-𝐷𝑒𝑗𝑎𝑚𝑒 𝑝𝑒𝑛𝑠𝑎𝑟𝑙𝑜... 𝑁𝑜. 𝑃𝑢𝑑𝑟𝑒𝑡𝑒 -le saque la lengua, todos los alumnos presentes estaban mirandonos. Amelia iba a golpearme cuando entró el profesor y no le quedó más de otra que sentarse en otro lugar.

La clase fue rápida, hablando de rápida, adivinen quien contesto las preguntas de mate. Exacto YOO.

Al terminar salí al baño a lavarme las manos. Pero mi tranquilidad no tardó mucho cuando ví a Amelia para en la puerta con otras dos chicas.

En el baño no había nadie, así que temía por mi vida.

-𝑉𝑎𝑦𝑎, 𝑣𝑎𝑦𝑎, 𝑣𝑎𝑦𝑎. 𝑀𝑖𝑟𝑒𝑛 𝑎 𝑞𝑢𝑖𝑒𝑛 𝑡𝑒𝑛𝑒𝑚𝑜𝑠 𝑎𝑞𝑢𝑖́ -dijo Amelia. Su mirada paso de burlona a una mucho más seria-. 𝐴𝑔𝑎𝑟𝑟𝑒𝑛𝑙𝑎. -volteo a ver a las dos chicas detrás suyo, una chica de cabello rosado y ojos azules y otra chica de tez morena y cabello casi blanco, solo por la mitad. Me acorralaron en la pared del baño agarrandome por mis muñecas y dejandome casi sin movimiento.