010

595 51 1
                                    

El desayuno continuo con casi normalidad, Thomas comía más lento que se costumbre, normalmente comería todo lo más rápido que pueda y se iría a trabajar.
Pero hoy no era así, que extraño.

Esto era porque quería verte un poco más, te veías tan linda ante sus ojos, quitando de lado las ganas que tenía de arrancarte el vestido y romperte a embestidas.
Thomas estaba demasiado concentrado en tu risa al hablar con tu amiga, y en como su pechos rebotaban ante esto. Thomas no se dio cuenta de del la cuchara, coloco su brazo en la mesa y está salió volando, junto con la comida en ella. Ensuciando tu busto y su máscara.
Emily te suelta un codazo y te alcanza una servilleta. Rápidamente entiendes, quisiera entender matemáticas igual de rápido que esto.

—esta bien, Tommy no pasa nada —susurro al ver si forma nervioso, de alguna forma intentando disculparse conmigo.
Estaba nerviosa, pero igualmente lo haría, sujete el costado de su máscara junto al pasado de papel, limpio su rostro y máscara. Todos en la mesa nos miran, mis mejillas se sonrojan, la mierda de Thomas me traía loca, por la pena…si.

—Tommy, creo que sería de buen gusto que también limpies a tu esposa, después de todo, no hay más servilletas así que hazlo con la lengua —el tomo de Hoyt cambia de divertido a enojado, golpeando la mesa.
Miro a Thomas avergonzada, y comienzo a limpiar la línea entre mis pechos.
Lo que no me esperaba era sentir el cálido abrazo de su lengua entre mis tetas.
Mis mejillas se encienden al rojo vivo. No creí que Thomas sería capaz de hacerlo después de todo.

Al darse cuenta de lo que hizo rápidamente toma su plata y corre a la cocina a lavarlo.
Estaba huyendo de la situación pero por lo menos fue considerado.
Tanto Emily como yo simplemente comimos algo de frutas, sin tocar la carne, Luda nos regaño por eso. Rápido tomo mí plató y voy atrás del más grande de la casa.

Lavo mí plato junto a el, su figura estaba tensa, acaricio su brazo y este se pone las tensó.
—Thomas…no me molesta que hagas cosas así, sabes…después de todo soy tu pequeña esposa —susurro de forma provocativa mientras me enredando entre sus brazos. Este era el paso dos para seducir a el ya nombrado.
Emily puso una estricta lista a seguir para seducir.

№1: ser provocativa pero fingir ignorancia.
№2: usar palabras  coquetas, seductoras pero con sutileza.
№3: insinuar sexo sin parecer muy obvia.
№4: gemir, jadear o hacer sonidos provocativos ante cualquier rose.
№5: no hay número cinco.

Thomas traga fuerte al escuchar tus dulces palabras, era como mostrarle una golosina a un niño y no dársela.
—si lo hicieras de nuevo no le molestaría en lo absoluto…—me pegó a su pecho, masajeando sus brazos.
Este no se resiste mucho, después de todo nunca a estado serca de su sexo opuesto.
Avergonzado comienza a lamer tus pechos, rápido gimes siguiendo otra de las reglas de seducción.
Esto funciona de maravillas ya que lo animo bastante a seguir con su trabajo.
Masajeó sus pechos, dejando un rastro de besos. Sus manos viajan hasta tus caderas para mantenerte quieta y comenzar jugar más con tus pechos, una de sus manos sigue viajando hasta tu trasero donde lo acaricia metiéndose dentro de tus bragas, masajeando algo que no debería masajear en este momento.

El momento se ve interrumpido por Emily, Thomas al darse cuenta de su presencia se separa completamente de ti y sale corriendo de nuevo a su trabajo.
Al estar nuevamente sola con Emily mi risa se escapa, esto era tan nuevo para mí.
—no pensaba que se calentaría tan rápido, en poco tiempo estaremos afuera comiendo comida de verdad —susurra divertida, el resto del día continúo con normalidad en esta casa de locos, la mayor parte del día estuvimos encerradas en la habitación, ya que no nos podían vigilar todo el tiempo.

Este tiempo a solas fue bien aprovechado por Emily, buscando nuevas ideas bastante provocativas. Mis mejillas se sonrojan al escuchar cada loca idea algunas llegando a lo absurdo.
Desdé agacharme frente a el hasta esperarlo en tanga en la habitación.
Lo último si qué era loco, bueno, todas las sugerencias lo eran, mí dignidad se iba alejando casa vez más.
Pero la dejé continuar.
Al final Emily concierto en una idea final,  según ella no podíamos tomar el camino fácil. Por eso eligió lo de la ropa interior al final del día, no me quejaba de alguna manera en tener sexo con Thomas.

Pero para eso tendríamos que tener ropa interior sexy, y las bragas que Luda nos daba no eran muy buena idea, después de todo eran pares que ella no usaba, calzones de viejo.

Emily saca uno de los broches de su cabello, y se acerca a la puerta de la habitación, comienza a abrir la puerta con el broche, no sabía que podía hacer eso.
—si vamos a hacer esto lo haremos bien, vamos a buscar entre las maletas de las personas que tuvieron un final trágico aquí en esta casa—comenta para ella.

No podíamos escapar aún con esta habilidad de Emily, días atrás vi como Thomas perseguía un chico con su motosierra. Y aún que el chico era muy veloz la motosierra y las trampas le ganaron.
Correr por ahora no era opción, menos con nuestra actitud actividad física.


Para ser honesta no se me ocurrió nada más, si no les gusta lo cambio.

Palabras:928

━━━⊱MONSTER⊰━━━Donde viven las historias. Descúbrelo ahora