sex games

capitulo 8

Después de enterarse de la verdad devastadora sobre la apuesta entre Yongi y Jungkook, Tae se sintió traicionado y decidido a enfrentar la situación.

Tomando una respiración profunda para controlar su angustia, Tae tomó su teléfono y marcó el número de Jimin. Necesitaba contarle todo, aunque le doliera cada palabra que saliera de su boca.

"Jimin, necesito verte. Hay algo que debes saber", dijo Tae con voz temblorosa cuando Jimin respondió.

Jimin, desconcertado por la urgencia en la voz de Tae, accedió a encontrarse con él en un café cercano. Cuando Tae finalmente le reveló la cruel apuesta entre Yongi y Jungkook, Jimin se sintió como si el mundo se derrumbara a su alrededor. No podía creer que los sentimientos que había desarrollado por Yongi pudieran haber sido manipulados de esa manera.

Con lágrimas en los ojos y el corazón destrozado, Jimin miró fijamente a Tae y agradeció que le hubiera contado la verdad, aunque le causara tanto dolor. "Gracias por decírmelo, Tae. No sé cómo voy a procesar esto, pero necesito tiempo", dijo Jimin, luchando por contener la emoción.

Mientras tanto, Yongi, ajeno al drama que se desarrollaba, se cruzó con Jimin en el campus. Antes de que Yongi pudiera decir una palabra, Jimin lo abofeteó con fuerza, sorprendiendo a todos los que estaban cerca.

"Esto es por mi mejor amigo y porque prefiero alejarme de ti", dijo Jimin con voz firme, con los ojos llenos de decepción y desprecio. "No te acerques más a mí, Yongi. Ya no quiero verte".

Yongi, aturdido por la reacción de Jimin y la magnitud de sus propios actos, asintió con la cabeza en silencio, sin atreverse a decir una palabra más mientras veía a Jimin alejarse.

De vuelta en su habitación esa noche, Yongi se enfrentó a sus propios demonios. Se odiaba a sí mismo por lo que había hecho, por haber jugado con los sentimientos de Jimin y por haber perdido la amistad de Tae y la confianza de Jungkook. Con el corazón lleno de remordimiento y arrepentimiento, supo que las consecuencias de sus acciones lo perseguirían durante mucho tiempo.