Cuando, Dónde y Cómo el Amor quiera

4. Mi hija. Mis Padres

– LOVE, LOVE ¿DÓNDE MIERDA ESTABAS? LLEVO HORAS ESPERÁNDOTE – Marisa mira a Milk - ¿Y ESTA QUIÉN ES?

- Yo soy M...

- MARISA ¿CUÁNTAS VECES TENGO QUE REPETIRTE QUE NO ENTRES ASÍ A MI DEPARTAMENTO? LA LLAVE QUE TE DI ES SOLO PARA EMERGENCIAS

- YO SOY TU NOVIA Y ENTRÓ A ESTA CASA CUANDO QUIERA ¿ME OYES? ADEMÁS ¿QUÉ SE SUPONE QUE TENGO QUE HACER? ESPERAR HASTA QUE LA SEÑORITA SE DIGNE A APARECER...

Mientras la pareja "no tan pareja" al criterio de la jugadora seguía dale y dale de discutir, la pelinegra se acercó hasta el refrigerador, buscó el hielo, lo puso en una trapo que encontró en la mesada y volvió al living.

- QUE NO MARISA, QUE NO. AHORA NO QUIERO IR A COMER, ¿NO VES COMO TENGO EL PIE? – la discusión seguía

- Toma ponte esto – Interrumpía Milk alcanzándole el hielo a la morena

- Gracias – Volvió a mirar a la castaña – SI TIENES TANTA HAMBRE COMO DICES TE HUBIERAS QUEDADO TU SOLA COMIENDO, SI YA LO HAS HECHO OTRAS VECES.

- ¿SOLA, SOLA? TU SABES LA VERGÜENZA QUE PASÉ CUANDO TODO EL MUNDO VIO QUE ME HABÍAN DEJADO PLANTADA. YO SOY UNA MODELO RECONOCIDA LOVE, A MI NADIE ME DEJA PLANTADA.

Calladita y sin más nada que hacer, Milk aprovechó el momento y se fue lentamente hacia la puerta. Tomó la manija y volteo a ver a la pelirroja – Adiós Love – dijo muy pero muy bajito de manera que nadie la oyera sin detenerse ni siquiera a pensar porque le costaba tanto dejar de mirar a la diseñadora.

- PUES POR MI PUEDES SER EL MISMÍSIMO PRESIDENTE, QUE NO VOY A IR A ALMORZAR CONTIGO HASTA QUE NO ENTIENDAS QUE NO PUEDO CAMINAR. NI SIQUIERA TE HAS PREOCUPADO POR VER COMO ESTABA, SOLO ES TU, TÚ Y TU. SI NO FUERA POR ELLA... - levantó la cabeza buscando a la chica que la había traído, pero nada – Se fue... otra vez se fue.

- ¿Quién se fue? – preguntaba Marisa que no estaba para nada prestando atención a su novia, sino que en cambio se había puesto a juguetear con su celular.

- Ella, la pelinegra – Love recorría todo su apartamento con la mirada esperando que por arte de magia Milk apareciera

- Bueno si esteeee Love- La modelo cambiaba la conversación - Me acaban de escribir las chicas ¿Quieres salir a bailar esta noche?

- ¿Aaaa bailar? ¿De que estas hablando Marisa? – le costaba volver a la conversación ya que su cabeza seguía puesta en la deportista.

- ¿Si quieres salir a bailar esta noche? – volvía a preguntar

"¡Ayyy dios mío, dios mío!" pensaba Love

– No Marisa no quiero salir a bailar. Me voy a tomar la tarde libre debido a que no creo poder moverme mucho y mañana tengo que trabajar bien temprano. Además, hoy quiero hablar con mi hija.

- Bueno, pero ¿no te molesta si yo si salgo cierto? - preguntaba la castaña, aunque parecía que lo iba a hacer de todas maneras.

- No Marisa, no me molesta puedes salir tranquila.

- OK amor, entonces nos vemos luego ¿sí? – le dio un corto beso y se fue como entró. Rápido.

- Pufffff - suspira Love - ¿Qué estás haciendo con tu vida Love? ¿Qué estás haciendo? – se decía así misma mientras agarraba el hielo y se lo volvía a poner en el pie.

Mientras el hielo curaba la inflamación de Love, cerca de allí se podía ver por las calles de New York una pelinegra alta que juraba y perjuraba que nunca más iba a regresar por estos lados de la ciudad.