17. Yo ya te Pertenezco.

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- Hola – saludo Love. - Estas muy bonita – halagó a la pelinegra que simplemente llevaba puesto un pantalón ajustado negro acompañado con una remera del mismo color y su pelo suelto en ondas.

- Love – tomó su mano y la beso – si algún día dejo de sonreír, por favor recuérdame este momento. Al lado tuyo las demás somos simples espectadoras de tu belleza – Subió su cabeza y se encontró con los ojos más hermosos que alguna vez puedan existir.

Love se ruborizaba ante las palabras de Milk, pero en ningún momento rompió la conexión visual.

- ¿Te hicieron sufrir mucho? Se lo pesados que pueden ser cuando quieren – pregunto la diseñadora que al parecer estaba al tanto del hostigamiento que iba a sufrir la jugadora.

- ¿Tu sabias? – La pelinegra asintió – Oye, pudiste haberme avisado que un comité me iba a estar esperando preferiría tirarme a un pozo lleno de estrellas de reality que volver a pasar por lo mismo. Por cierto, tu hija ha heredado tu mirada asesina – Le dijo en voz baja a Love mirando de reojo a la pequeña.

- Bueno al menos algo de mi hay en ella, últimamente es toda un mini tu. Por cierto, tienes prohibido seguir enseñándole a conquistar chicas – por fin lo dijo.

- ¿Prohibido? Pero si yo no le enseño, la niña tiene un don nato, caen rendidas a sus pies. Yo sólo soy como el profesor Xavier de los X-men, sólo entrenó su talento.

- Si solo la entrenas entonces supongo que "Milk dice que debemos a ayudar a damiselas en peligro" es parte del entrenamiento ¿cierto? – pregunto Love alzando su famosa cejada.

- Al parecer la parte de no le digas a tu madre lo que yo dije no la capta muy bien todavía – se defendió la basquetbolista mirando a su hija que se escondió detrás de sus abuelos.

- Y el jueguito de ponerle puntos a las mujeres... ¿Lo inventó Pat también? – Era View la que esta vez se metía en la conversación. La venganza del 9 se hacía presente.

La abogada se ganó una mirada de "si te agarro te mato" por parte de la deportista – Eeee...

-Uyyy alguien se acaba de ganar un 8 – comentó Orm

- A propósito – interrumpió Love – ¿porque yo no tengo puntaje? - la curiosidad mató a Lord Tubbington.

- Pat cariño ven aquí– Milk llamó a su hija cariñosamente esquivando la pregunta de la mayor. Que esta niña no sabe cuándo cerrar la boca.

- No mami mejor me voy a dormir que ya se me pasó la hora permitida, ¿cierto mamá? – Pat no iba a caer en las garras de su madre.

- Si mejor ve a dormir pequeña cobarde – le dijo Love a su hija – y no creas que tú te vas a escapar de la respuesta, sea como sea me vas a decir mi puntaje – presionó a la diseñadora.

- ¿Sea como sea? Mmmm eso me gusta – insinuó Milk sin darse cuenta de que todavía estaba rodeada de gente.

-Pattranite si no quieres que tu padre vuelva a interrogar a Milk será mejor que se vayan – apuró Yaya al ver la cara de su marido ante este último comentario de la pelinegra.

- Si creo que es mejor que nos vayamos – Anunció ojimarron a su acompañante – adiós a todos – se despidió la diseñadora.

- Hasta luego – Milk esquivando la mirada del hombre mayor

- ¡Espera mami! – Pat corrió y salto hasta su reciente madre – ¿Mami, aunque esté prohibido me vas a seguir enseñando a conquistar chicas? – le susurró la pequeña a la mayor

- Dalo por hecho bicho bolita. Nadie nos prohíbe nada a nosotras ¿cierto? – contesto Milk

- Mmmm – pensaba la niña – creo que mamá nos puede prohibir cualquier cosa – la lógica de la pequeña era acertada.

Cuando, Dónde  y Cómo el Amor quieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora