Destino en Bangkok (Prt.2) - JoongDunk

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Al día siguiente, Dunk llegó a la cafetería con una sonrisa radiante. Había dormido bien, y la perspectiva de un nuevo día lleno de posibilidades lo hacía sentirse optimista. Al acercarse a la puerta, vio a Force a través del vidrio, organizando los últimos detalles para abrir la cafetería.

—¡Buenos días, Force! —saludó Dunk alegremente mientras entraba, la campanilla sobre la puerta tintineando suavemente.

Force levantó la vista de su trabajo y sonrió al ver la actitud entusiasta de Dunk.

—Buenos días, Dunk. Te veo de buen humor hoy —respondió Force, con una sonrisa divertida.

—Sí, me siento genial. ¿En qué puedo ayudar para que abramos pronto? —dijo Dunk, poniéndose manos a la obra de inmediato.

Force señaló algunas cajas de suministros que necesitaban ser organizadas y algunas mesas que aún no estaban en su lugar.

—Podrías empezar con esas cajas y luego asegurarte de que las mesas estén bien acomodadas —sugirió Force.

Dunk asintió y comenzó a trabajar, moviendo las cajas con facilidad y colocando los artículos en su lugar. Mientras organizaba las mesas, Force lo observaba de reojo, notando el cambio en la energía de su amigo.

—Así que, ¿vas a contarme qué te tiene tan feliz hoy? —preguntó Force, rompiendo el silencio con una sonrisa coqueta.

Dunk sonrió mientras organizaba las últimas cosas en la cafetería, su mente reviviendo el encuentro que tuvo con Joong. En un rápido flashback, recordó cómo había tropezado con el alfa por accidente mientras revisaba algo en su celular.

FLASHBACK:

Dunk caminaba distraído por la acera, absorto en su teléfono mientras revisaba unos documentos importantes para la cafetería. De repente, chocó con alguien y casi perdió el equilibrio. Levantó la mirada apresuradamente, disculpándose rápidamente.

—Oh, lo siento mucho, fue mi culpa —se disculpó Dunk, levantando la mirada y quedando sorprendido al ver quién era el otro individuo.

Era Joong, el carismático alfa que había visto en la oficina de Pond y luego en la suya propia. Joong lo miró con una expresión de preocupación genuina.

—No te preocupes. ¿Estás bien? —preguntó Joong, su voz suave y tranquilizadora.

Dunk se sonrojó ligeramente ante la atención de Joong y asintió rápidamente.

—Sí, estoy bien. Fue mi culpa por no prestar atención —respondió Dunk, tratando de mantener la compostura.

Joong sonrió cálidamente y se disculpó de nuevo, colocando una mano con delicadeza en la cabeza de Dunk como gesto reconfortante. Luego, con esa misma sonrisa encantadora, entró al edificio donde seguramente tenía asuntos importantes que atender.

Dunk se quedó mirando a Joong con admiración mientras este se alejaba, impresionado por su presencia segura y amigable. Luego, con un suspiro suave de sorpresa y felicidad, Dunk reanudó su camino hacia la cafetería, dando pequeños brincos de alegría ante el encuentro con ese alfa tan especial.

FIN DEL FLASHBACK

De vuelta en el presente, Dunk terminó de organizar la cafetería con una sonrisa juguetona. Force lo observó con diversión, notando el brillo en los ojos de su amigo.

—Simplemente estoy disfrutando del día, Force. No hay ningún misterio —dijo, aunque una ligera chispa en sus ojos sugería que había algo más.

Force decidió no presionar más, contento con la respuesta de Dunk por el momento.