adieu

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Depositando la camiseta en la cama, Jaehyun la dobla cuidadosamente para luego acomodarla bien en el interior de su maleta. La maleta no es grande, pero las cosas que necesitará durante este tiempo entran perfectamente y aún queda un poco de espacio por si acaso.

Un menudo cuerpo se asoma a través de la abertura de su puerta, el chico de cabello amarillo marfil le sonríe y sacude en una de sus manos lo que Myung anteriormente había estado buscado por casi toda la casa.

—Lo encontraste —Dice el pelinegro, dándole al mayor el permiso de pasar.

Riwoo se acerca a él y le extiende el cargador de su celular, Jaehyun lo toma y le agradece por la molestia de haberlo buscado antes de seguir con su labor. El rubio se sienta en una esquina de la cama donde no molestara y lo mira fijamente por un momento mientras él termina de doblar un pantalón y lo guarda junto a unas zapatillas rojas. Myung sabe que el mayor quiere preguntar algo, sin embargo, parece no atreverse.

—¿Ya tienes todo? —Riwoo pregunta a cambio al verlo deslizar ambos cierres de la maleta. Él asiente y levanta la maleta para dejarla de pie en el suelo.

—Estoy seguro que sí.

Había sido una decisión difícil de tomar, pero después de pensarlo durante un par de días, Jaehyun decidió que lo mejor para él es descansar un tiempo lejos de la ciudad. Le fue ciertamente trabajoso solicitar una licencia de ausencia y que los directivos de la universidad se lo concedieran, tuvo que presentar varios documentos y hacer uso de su impecable registro para lograrlo. Él necesita descansar, física y mentalmente.

El tiempo le será útil para dejar ir los trozos de su rota relación. Dolorosamente, comprendió que no puede aferrarse a sólo una voz que siempre dice las mismas diecisiete palabras. Tiene que aceptar que Taesan no quiere verlo ni oirlo. Tiene que dejar de insistir por algo que no volverá.

—Estaré en la sala —Suelta Riwoo. Jaehyun se había olvidado que él estaba ahí, murmura una afirmación mientras ve al chico marcharse.

Un lamentable suspiro escapa pesadamente de sus labios. Mira por unos largos segundos el celular que descansa sobre su cama, se inclina y lo coge; los mensajes de su padre se superponen a las demás notificaciones.

Padre:

Espero que tengas un buen viaje.

Avísame cuando hayas llegado, así puedo pasarte a buscar en el aeropuerto.

Una picazón se asienta en sus fosas nasales. En menos de tres horas estaría en China junto a su padre. Es lo mejor.

Rápidamente responde a los mensajes. Su pulgar se desplaza por la pantalla táctil y pulsa el ícono de llamadas. Hay algo que necesita hacer, no puede irse sin antes despedirse de su ex-novio, lo escuchara o no.

El buzón de voz lo recibe inmediatamente, las palabras se repiten una vez más al otro lado de la línea.

Beep.

—Te amo —Suelta con entereza. Los siguientes segundos pasan en silencio hasta que vuelve a hablar—. El primer día que te vi me enamoré de ti. Te amé cada minuto de cada día en el que fui conociéndote, cada segundo y cada respiro a tu lado. Te amé ayer, te amo hoy y te amaré mañana, pero... entendí que tú no volverás —Un nudo se forma en su garganta después de decir aquello. Lo entiende, más aún no puede aceptarlo.

Jaehyun se voltea hacia la gran ventana de su habitación, la noche está a punto de cubrir por completo el cielo, consumiendo los últimos rayos del sol.

—Nunca antes pensé que podría perderte. No debí de haberte engañado, realmente no quería traicionarte y herirte como lo hice. Te pido que me perdones —Una capa cristalina cubre su visión, las lágrimas se arrinconan en las esquinas—... Espero que algún día puedas perdonarme.

Sus labios tiemblan. Las lágrimas se derraman y algo espantosamente doloroso abraza su pecho. Por favor...

—Adiós, Taesan.

Cuelga.

Limpia su rostro y se dirige a la sala del departamento. Riwoo le pregunta nuevamente, y por última vez, si ya tiene todo guardado y luego de que él asistiera con la cabeza, el rubio lo acompaña hasta fuera del edificio para que Jaehyun subiera a un taxi que lo llevaría a su destino.

Jaehyun observa el cielo desde la ventanilla del vehículo. Oscuro, sin estrellas. Vacío.

Mensajes de voz ━━ DDINGDONGZ.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora