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La lluvia cae de forma constante por las calles de Yokohama, en las noticias pronosticaron que lloveria hasta muy tarde en la madrugada.

Eso no le interesaba mucho a los hermanos Tanizaki. Mientras la menor estaba en una pillamada en casa de su compañera, Haruno, el mayor simplemente veía la televisión terminando de cenar.

Las clásicas películas Romcom lograban entreterlo por el momento. Aunque los ruidos en su habitación lo alertaron.

Con cuidado y armandose con un rociador de agua con el que solía regar los cultivos que recientemente empezaba a cuidar, se adentro al lugar, pudo llevar una mejor arma, pero sabía perfectamente la causa de esos ruidos y en consecuencia, sabía que no necesitaba realmente un arma.

De inmediato, abrió la puerta, rociando justo en el rostro del sujeto que apenas había entrado por su ventana.

- ja ja, que agradable bienvenida - hablo sarcásticamente un empapado chico.

- quizás sí usarás la puerta principal y no mi ventana, te recibiría mejor. Aunque sería preferible que no vinieras, no veo razón por la cual estés aquí - respondió el dueño del lugar.

Encendiendo las luces, Junichirō pudo notar las ropas completamente mojadas que llevaba el otro, Tachihara Michizō.

- oye, tu ropa está goteando - señaló un poco irritado sabiendo que luego debería secar eso.

- vaya Sherlock, no me dí cuenta -

Un poco enfadado por el tono con el que le hablaba el otro chico, el agente volvió a rociarlo con el agua.

- bien, ¿Ahora cuál es tu escusa? - pregunto mientras comenzaba a buscar algo en su armario.

- estaba terminando una misión, la lluvia cayó de repente y éste era el lugar más cercano -

Una mentira.

Tanizaki ya estaba acostumbrado a ellas.

Desde hacía un tiempo que el mafioso hacía eso, simplemente irrumpia en su hogar a cualquier hora de la noche, entrando por la ventana de su habitación e inventando algunas escusa sobre porque estaba ahí.

De todas formas el pelirrojo natural ya no hacía más que resignarse, en un inicio lo había intentado echar y cerrar bien, cosa q no funcionó mucho contra alguien que puede controlar el metal.

Intento llamar a los otros compañeros del peliteñido, los cuales... Parecían estar ocupados con sus trabajos cuando los llamo.

De igual forma, ya se estaba acostando, y el otro no hacía algo lo suficientemente malo como para echarlo en definitiva.

Exceptuando el hecho de que literalmente era allanamiento de morada irrumpir así, al menos agradecía que el otro hiciera ruido al entrar, sabía de sobra que lo hacía a propósito puesto que siendo un mafioso y perro de caza, no iba a cometer un error tan idiota como hacer tanto ruido.

Olvidando lo idiota que era su escusa de ésta vez, puesto que podía llamar a alguien para que lo buscara en un auto, simplemente le guío hasta el baño del lugar.

- ten - dijo mientras le extendía una toalla - no vas a andar por mi casa mojando todo, tampoco quiero que te dé un resfriado, así que usa el agua caliente y báñate, también dame tu ropa para ponerla a secar -

El otro simplemente acepto e ingreso al pequeño baño, pese a que era casi imposible que se resfriara con una simple lluvia, no iba a rechistar contra el dueño del lugar si éste le miraba tan molesto.

- te traeré algo seco para que te vistas -

Unos minutos más tarde, saliendo del baño y con la ropa puesta, pudo notar un olor agradable salir de la cocina.

Podía notar al agente moviendo ligeramente las caderas al ritmo de una melodía proveniente de un comercial en la TV, no pudo evitar reír levemente, llamando la atención del otro.

- no te rías, es pegajosa - se defendió de la burla, hasta notar que nuevamente el invitado-no-invitado estaba mojando el piso de su hogar, ésta vez por su cabello el cual ni había secado después de bañarse, únicamente tenía la toalla en su mano -increíble, ¿No puedes siquiera secarte el cabello solo? Dame eso -

Antes de que Tachihara se diera cuenta, el suave toque del contrario estaba pasando suavemente la toalla por sobre sus teñidos cabellos, estando frente a frente, él levemente agachado, y Tanizaki en puntitas.

Pudo notar que aunque tuviera el ceño levemente fruncido, no estaba molesto.

Al terminar, ambos se sentaron a comer, viendo la película Romcom que Junichirō veía antes de que el otro llegara, ahora acompañado de las leves risas y comentarios que decían entre ellos.

En momentos así, Junichirō se preguntaba desde cuando había dejado de molestarse realmente con el otro, para simplemente esperar sus visitas sorpresivas. No quería admitirlo, pero la presencia del Michizō se había vuelto agradable con el tiempo.

Mientras su contrario no pensaba diferente, en un inicio sí había entrado al hogar Tanizaki por algo relacionado a una misión, con el tiempo lo hizo para molestar al otro, y actualmente lo seguía haciendo simplemente porque la tranquilidad del lugar le hacía feliz.

Ambos eran muy orgullosos para admitir que disfrutaban pasar tiempo juntos, por lo que únicamente pasarían esos momentos juntos, fingiendo molestia, que en algún punto se transformaba en risas.

🔸🔸🔸

Bueh, la pendeja volvió con otra historia larga, se supone que solo serán 7 caps, debido a que hoy 24 cumple Tanizaki, mientras que el 30 cumple Tachihara.

Ésta historia está en el mismo universo que otras como las de los cumples d Ranpo, Atsushi, Higuchi y otras, por lo que las cosas no son 100% fieles al canon de Bungō.

Si llego a fallar con un día, les doy permiso de piedrearme mi casa (hoy casi se me olvida, aunque ya tenía listo el cap, solo se me olvidó publicarlo).

Sin más que decir, Rein se despide.
Besitos ♡⁠( ༶ ˃͈⁠ 3 ⁠˂͈⁠ )♡
Mata ashita ne~

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