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CAPÍTULO III “Su Niña”
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— TERMINÉ CHOCANDO el auto con el poste de luz, me saltó un vidrio y se me clavó en el hombro, desde ese día dejé de ser tan cabeza dura y comencé a usar el cinturon de seguridad aunque no me gustara, Dom casi me mata por no haberle echo caso. - Ambos soltaron pequeñas risas ante la anecdota de la chica, llevaban unos cuantos minutos recorriendo los alrededores de la ciudad en un ambiente tranquilo, si bien en un principio les costó hacer fluir la conversación, después de un rato notaron que tenian más comunicación de la que creían, todo empezó con Han contando como a sus diez años le habia robado el auto a su mamá solo porque quería asustar un poco a un niño que lo molestaba, persiguiendolo mientras él corria pensando que iba ser atropellado, Han dijo que no había pasado nada grave pero que lo castigaron durante un mes y no volvió a saber del niño, aunque algo en su voz a Rosita la hacia dudar divertida.
- ¿Letty también te regañó? - La miró unos segundos antes de volver su vista enfrente.
- No, Letty no estaba ahí, pero si nuestros amigos Vince y Jesse, ellos me gritaron; "¡Así se choca!" - Gritó imitando la voz de sus amigos, haciendo que las risas fueran un poco más fuertes esta vez, Rosita hacia tiempo no se reía así, le causaba felicidad recordar momentos con su familia. - Dom terminó riendose, me salvaron de que me cortara la cabeza, aunque no de la cagada a pedo que me dió Mia más tarde. - Se encogió de hombros ya calmando su risa. - Mi abuelo siempre decía que soy un tiro al aire.
