Asesina de Hombres || Matt Smith & Milly Alcock

44. ❤️🙏🏼

Nunca imagine que Matt estaría frente a mi de nuevo.

Y mucho menos imagine que me estaría pidiendo vivir juntos.

Iniciar una vida juntos.

Dios mío.

Ni siquiera le importaría mudarse a Australia solo para estar conmigo.

Eso sí que es más de lo que pude haber imaginado.

Me mira con tanta sinceridad, ahora es perceptible para mí cuanto me ama. Lo mucho que quiere estar conmigo.

—No tienes que darme una respuesta ahora mismo—habla de nuevo al no ver respuestas de mi parte—Puedes tomarte el tiempo que necesites para pensarlo.

—Si voy a pensarlo—respondo por fin, es que no se qué decir.

No sé si está bien mudarme aquí. O si sería una mejor opción pedirle a Matt que intentemos vivir en Australia a ver que pasa.

No sé que sentir al respecto, sé muy bien que quiero, quiero estar con él, pero aún no sé qué responder.

Le daré una respuesta completa cuando haya tenido tiempo de pensarlo.

Matt se da vuelta para cerrar el grifo de la bañera y me toma en brazos para darnos un baño.

No puedo evitar sonreir al mirarlo, es tan hermoso, tan dulce, parece mentira todo lo que vivimos antes de este momento.

Quedo en la bañera con las piernas a cada lado de su cuerpo y el agua tibia rodeandonos a ambos, estamos mas cerca que antes. 

—¿Y?—me mira con esos ojos dulces.

—¿Que?—pregunto.

—¿Ya lo pensaste?—su pregunta me hace reír.

—No aún no.

—¿Y que tal ahora?—acaricia mi mejilla con su nariz—Si me dices ganaríamos tiempo, puedo ir haciendo las maletas al terminar de bañarnos—sonríe—O podriamos tomar el primer vuelo a Australia para hacerlas tuyas.

—Pensé que tendría tiempo de pensarlo—bromeo, y sé que el también.

—¿De cuanto tiempo estamos hablando?—me mira con esa mirada pícara.

—No lo sé, pensé que yo decidía—Matt sonríe ante mi respuesta.

Es obvio que está bromeando.

—Claro que tu lo decides—acaricia mi mejilla—Piensalo, y luego me dices.

Recuesta ahora su espalda del borde de la bañera y su cabeza mirando al techo.

—¿Ya lo pensaste?—suelto una carcajada.

—Matt...—le salpico agua mojandole la cara.

Lo miro y está mirandome también, con una sonrisa y las mejillas sonrojadas.

—No quiero ser molesto—acaricia mis muslos que están a cada lado de su cuerpo, mientras me habla—Es solo que no tienes idea de lo mucho que quiero estar contigo, yo solo quiero estar junto a ti, no quiero verte ir nunca más.

No respondo nada, me acerco a el lo suficiente para besarle.

Matt enreda sus manos en mi cabello e intensifica el beso haciéndome sentir cada una de las mariposas que creía haber desaparecido y llenándome de todo ese fuego que creía haber extinguido.

No me cabe en la cabeza como un simple ser humano puede hacerte sentir tanto.

—No te separes de mi Milly, por favor—habla a mitad del beso.