Business Lovers [SasuHina]

¿No puedo ser yo?

"-¿Estás segura de que quieres ir a la fiesta de Sakura?"

"-¡Por supuesto! Sakura-san fue muy amable en invitarme"

Hinata observó su móvil debajo de la mesa, apretó sus labios ansiosa esperando la respuesta de Sasuke, veía el "Typing" bajo el nombre del chat desde hace dos minutos, pero aún no obtenía respuesta ¿Cuál era el problema?

"-Está bien, te veo a la salida"

¿Eso era todo? Mordió su labio inferior y se apresuró a responder.

"-Sakura-san dijo que nos iríamos juntas. Veámonos en el karaoke"

De nuevo se tardaba, pero esta vez solo contestó con un pulgar hacia arriba. Frunció el ceño extrañada, Sasuke parecía olvidar en ocasiones que su relación era secreta; intentaba ser discreta durante el almuerzo y horas libres, pero sabía que era demasiado obvia, no podía evitar mirar embobada a su novio cada vez que estaban juntos y sus sonrojos no ayudaban para nada ¿Acaso el Uchiha no se enteraba que hacía de ella un lío? De todas formas no quería ser una molestia para él al esperarle, puesto que él saldría un poco más temprano que ella. 

El profesor entró por la puerta saludando a la clase, bloqueando por fin su móvil, guardándolo en su bolso miró hacia el frente luego de dejar salir un suspiro; si había aceptado ir era simplemente para encajar poco a poco en su mundo, solo quería estar aún más cerca de él.

Al final de sus clases esperó bajó la sombra de un árbol, luego de quince minutos, optó por sentarse en la primer banca que encontró. Le había enviado un mensaje a Sakura, pero la pelirrosa ni siquiera la había leído luego de 40 minutos.

-¡Hinata-chan! –Sakura se acercó sonriente con otra chica tras ella.

La Hyuga apretó sus labios con timidez poniéndose de pie hasta que ambas acabaron de acercarse, miró a la desconocida con curiosidad, otra chica preciosa con un cabello rubio largo, ojos claros y coquetos.

-Ella es Ino –presentó sin más-. Démonos prisa, debemos tomar el autobús.

Hinata miró a Sakura levemente confundida, no le había dado ninguna excusa por tardar tanto, simplemente tomó a Ino de la mano y la jaló con rapidez hacia la salida del campus. Miró a la rubia en medio de las carreras de la Haruno, sonriéndole con timidez.

-Es un placer, Ino-san –dijo a la rubia en un tono un poco más alto.

-Igualmente, Hinata-chan –respondió la rubia sonriente mirando hacia atrás.

Llegaron a la estación y subieron rápidamente al autobús que ya había llegado; Hinata mordió su labio inferior, su padre por obvias razones no le dejaba tomar el transporte público, esto sería otro secreto. Sakura se sentó rápidamente en el último asiento vacío para dos que había, jaló a Ino de la mano sentándola junto a ella con algo de brusquedad. La Hyuga se quedó de pie mirando el autobús lleno, cuando el vehículo comenzó a andar nuevamente trastabilló.

-Ten cuidado –le recriminó con fastidio la señora que estaba en el asiento frente a la pelirrosa, Hinata casi le caía encima.

-L-lo siento mucho... -dijo ahora apresurándose a buscar la agarradera más cercana.

Rebuscó entre sus cosas hasta dar con una pequeña cajita rosa envuelta con un listón rojo, extendiéndoselo a la Haruno.

-Feliz cumpleaños, Sakura-san –felicitó sonriente.

-Vaya, gracias –respondió la chica tomando la caja con desgano dejándola a un lado del asiento.

Hinata se forzó de alguna forma a mantener su sonrisa, bajó su rostro incómoda, acomodó su cabello detrás de su oreja; sintió su móvil vibrar dentro de su bolso, al sacarlo notó que era Sasuke quien le llamaba, miró la pantalla dubitativa, sobre todo cuando vio las miradas curiosas de ambas chicas frente a ella, ignoró la llamada y volvió a guardar su móvil. Cuando llegaron al local pudo ver el atardecer a lo lejos; realmente se sentía extraña en ese momento.