"Is it my imagination or have I finally found something worth living for?
I was looking for some action but all I found was cigarettes and alcohol."—
Sergio se encuentra solo con Pato en el departamento luego de año nuevo.
Así como así habían transcurrido más de una semana desde año nuevo y Max había vuelto a trabajar en el hospital. Como había tenido libre la semana de navidad, le tocaba estar de guardia la próxima festividad pero eso no significó que no hubieran podido almorzar juntos el 31 de diciembre los tres juntos.
Luego de las 12, cuando año nuevo llegó, Max pudo hacer una video llamada a sus chicos preferidos. Bueno, solamente Sergio porque Pato estaba durmiendo para esa hora, lo que significaba que el alfa podría verlo recién al otro día cerca del medio día.
La llamada no fue muy larga de todos modos, pero sirvió para sentir que estaban un poquito más cerca de todos modos, aunque uno estuviera en casa y el otro en un pequeño cuarto de hospital esperando que esa noche no pasara nada malo con sus pacientes.
En retrospectiva, Sergio era conciente de que había sido un precioso fin de año en comparación del anterior en dónde Patricio y él se encontraban en aquel refugio con gente que padecía su misma suerte. Pero este año no, este año había conocido lo que era ser amado por un alfa fuerte, amable, noble y cariñoso como lo era Max.
"Papi, ¿Li y Pi?" Preguntó Pato, con uno de sus juguetes en la mano y mirándolo con ansias.
Sergio sonrió ante la pobre pronunciación de Patricio, y le acarició suavemente el cabello.
"Liam y Pierre vendrán pronto, con el tío Carlos amor."
Habían invitado a los hijos de Charles y Carlos para almorzar. Incluso podrían ir a ver alguna película al cine que había cerca del apartamento.
Los cachorros se habían hecho amigos, al tener casi la misma edad y Sergio estaba muy feliz de que Pato tuviera amigos con quien pudiera jugar y divertirse. Estaba pensando llevarlo al jardín pronto.
"Hum," tarareó el pequeño, un tanto impaciencia de que sus amigos estuvieran pronto aquí.
"Vamos a preparar algo rico, para cuando vengan ¿Que dices, amor?" Los bellos ojos de Pato se iluminaron y enseguida corrio hacia la cocina.
"Pato aiuda papi."
"Si amor, tu ayudas a papi," Sergio lo alzó en brazos y juntos empezaron a buscar lo que necesitaban.
El omega miró hacia el reloj de pared, notando que a Carlos se le había hecho un poco tarde pero Sergio no se preocupó por ello.
Cuando iban a comenzar a preparar todo para las visitas, alguien golpeó la puerta del apartamento.
Sergio se sorprendió un poco por esto, ya que no habían avisado desde recepción que alguien había subido hasta allí, lo cual siempre hacían. Supuso que al ser Carlos, quizás ya era conocido y por ello lo dejaron entrar así como así.
No le dió más importancia de la que tenía, qué grave error.
"Pato, Liam y Pierre ya están aquí," le avisó a su hijo, que había ido hasta la habitación a buscar su rompecabezas.
Cuando abrió la puerta, entonces, el corazón se le quedó helado y la respiración atorada. Parpadeó varias veces, antes de hablar.
"¿Lando?"
El beta sonrió, entonces. Pero era una oscura y para nada alegre sonrisa.
"Oh, mira quién se encuentra en casa jugando al esposo omega."
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A Christmas baby | Adaptación - Chestappen
FanfictionEn la pirámide de una sociedad sexista, los omegas son el último escalón de la cadena. La sociedad religiosa de Milton Keynes, Reino Unido pondera el alfa y omega bien casados y marcados, donde no hay lugar para la inmoralidad. El alfa Max Verstappe...