Eran las 4:30 de la madrugada, me levanté de la cama y me fui directo a darme un baño corto y muy rápido para llegar a tiempo al entrenamiento, fui con el uniforme que me dieron y ya estaba saliendo de casa a las 5:00, estaba oscuro, todavía no salía el sol.
Yo ya había llegado y veo a lo lejos del pasillo a James acercándose hacia mi.
-Buenos días Gaby.
-Buenos días James.
-Primera vez que alguien del equipo llega temprano- dijo sorprendido.
Estuvimos hablando hasta las 6:00 porque después abrirían las puertas para entrar hacia la cancha a las 6:15, al parecer el entrenamiento comenzaba a las 7:00 pero nadie se presentaba más temprano, solo James que por obvios razones se sorprendió al verme allí sentada tan temprano.
-Bueno, ya tenemos que entrar- dijo James.
-Esta bien.
Empezamos a entrenar el y yo hasta que iban llegando de poco en poco los demás jugadores, siempre ke preguntaban a James la razón en la que una mujer estaba jugando con chicos pero no les respondía y los sonreía, hasta que todos se acercaron a mi y Luis me dijo
-Gaby verdad? Quería preguntarte si te apuntas para practicar tiro libre, el que consiga meter mas goles gana.
-Claro que si, me apunto- dije emociónada.
Ya habían pasado unos 10 minutos y yo iba ganando con 9 goles, el único que faltaba allí era ese tal Richard.
Después de unos 10 minutos apareció Richard, saludo a todos menos a mi pero me miraba con una cara de embobado y desprecio al mismo tiempo, hasta que le pregunto a James quien era yo
-Y está chica?-
-Ahora te la presento, ven conmigo-
Lo veo de lejos a el y a James acercándose hacia a mi.
-Gaby, el es Richard el último integrante que siempre llega tarde- dijo matándose de risa.
-Hola un gusto- le dije sería por que su mirada que me tiraba era muy rara.
-Igualmente Gaby-
Pasamos un rato enlongando y cada 5 minutos volteaba a ver si es que me estaba mirando y efectivamente si se me quedaba viendo hasta que hicimos contacto visual
Se me quedaba viendo con esa cara, imagínese casi me da algo, hasta que James rompió el hielo.
-Y usted que mira con tanta atención?- me preguntó mirando hacia Richard.
-No nada es que estaba viendo como hacían ese pace-
-Si claro- dijo con sarcasmo.
Richard se acercó donde yo y James estábamos y nos preguntó a todos.
-Quieren ir a comer, tengo mucha hambre parce-
Y todos dijeron que si, decidimos que íbamos a un restaurante de hamburguesas, se nota que tenía hambre este niño, no saben comi deboraba la hamburguesa de solo un mordisco.
-Ush no ome, se nota que usted tiene más hambre que todos nosotros- dijo James matándose de risa
Seguimos allí todos hablando y riéndonos hasta que vimos la hora, ya era demasiado tarde, que hasta el restaurante iba a cerrar, todos se fueron y solo quedamos Richard y yo por que James le dijo a Richard que me llevará a mi hotel, pero ojo por qué todos habían tomado menos yo, yo era la más sobria de ese lugar.
-Puedes manejar- le pregunté a Richard con angustia.
-Si si no pasa nada, donde queda tu hotel nena?-
-Tu casa queda más cerca? O puedo ir caminando a mi hotel no pasa nada.
-No nonono, mejor vamos a mi casa, queda como unas 3 cuadras de acá-
-ok no pasa nada, ve con cuidado-
Llegamos a su casa y apenas Richard podía caminar de lo ebrio que estaba, casi se cae subiendo las escaleras para irse hacia su habitación, casi me da un infarto por qué si se muere yo seré la responsable allí. Llegamos a su habitación y se tiró a la cama.
-Si quiere puede dormir conmigo no hay problema- dijo Richard sacándose los zapatos.
-Yo puedo dormir abajo no hay problema-
Apenas termine de decir eso y Richard me atrajo hacia el y empezó a besar mi cuello.
-Quedese conmigo mejor-
-Nooo marica que usted está ebrio- dije intentando no sacar un gemido del fondo de mi.
-Y eso a mí que?-
No le respondí nada, el siguió besándome en todo el cuerpo que poco a poco iba bajando hasta llegar allá abajo, yo gemia de placer
El me quito la camisa del entrenamiento, me sacaba los shorts, y yo le hacía lo mismo, siguió dando besos pero sus besos estaban llenos de hambre, me mordía sutilmente el cuello y las demás extremidades, primero me metió los dedos, apreté su mano con mucha fuerza.-Sigo?- me preguntó jadeando.
-S-si- dije casi gimiendo de placer.
Lo hacía cada vez más rápido hasta que metió otra cosa dentro de mi, gemi con mucha fuerza, tanta fuerza que casi me quedo sin voz, el se activo más y empezó a moverse más rápido.Terminamos y yo baje dónde ya saben. Una cosa llevo a la otra y terminamos así
Y seguimos así hasta cansarnos. Y no poder más.
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El gran debut
Teen FictionUna chica llamada Gaby fue selecciónada para jugar con la selección colombiana