Carlos había decidido escalar la torre del castillo, impulsado por la desesperación y el deseo de descubrir la verdad. Al llegar a la cima, encontró a Adam y Maléfica en una conversación privada.
**Carlos:** (sorprendido) “¿Qué está ocurriendo aquí? ¿Por qué se ocultan en lo alto de la torre?”
Adam y Maléfica estaban en medio de un intercambio cargado de tensión. Adam, con una sonrisa que no alcanzaba a sus ojos, se giró hacia Carlos con una expresión fría.
**Adam:** (con frialdad) “Ah, Carlos. No esperábamos tu llegada.”
Carlos intentó acercarse, pero antes de que pudiera hacer otra cosa, Adam se adelantó, empujándolo hacia el borde de la torre. Con un último vistazo, Adam pronunció con una mezcla de desprecio y tristeza:
**Adam:** “Haces las cosas que haces por amor, y yo hago las cosas que hago por amor.”
Carlos cayó al vacío, su grito se desvaneció en la distancia. Maléfica observó el desenlace sin inmutarse, mientras Adam volvía su mirada hacia ella, su sonrisa una mezcla de satisfacción y frialdad calculada.