Un Trato

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"La vida no da lo que nosotros
queremos... Solo nos toca saber que
hacer con ello".


La >>reunión<< concluyó Lorena se despidió para irse dijo que tenía algunos asuntos que hacer, me puse en pie para recoger la computadora junto con mi móvil los demás estaban enfrente de mi. todavía trabajando no pude evitar mirar a Alessandro escribíendo algo en las hojas su hermoso perfil se hizo presente acompañado de su espeso cabello negro azabache, su mandíbula definida  llamo  mi atención junto con ese jersey crema.

–Daphne, nos podrías hechar una mano– La voz de Michell me saco de mis pensamientos –Si, claro– Me senté al lado de Michell mi mejor amigo seguía escribiendo y Alesandro hojeando las hojas –Ya tenemos los invitados, solo falta poner sus nombres en las invitaciones – Explicó la chica asentí con una sonrisa –Laurel, aquí esta la lista– la voz de Alessandro fue igual ronca como siempre pero con un toque de gracia, me paso las hojas que antes estaba hojeando.

Apellidos y apellidos se encontraban saqué la computadora para ver el diseño de las invitaciones.

–Nesesito que me den su opinión sobre las invitaciones ¿vale?– Pase la computadora a Michell ella las miro con un ligero asentamiento de cabeza luego la chica paso la computadora a mi mejor amigo, para luego a Alessandro.

–¿Y bien?

–Las dos están muy bien, el diseño y la calidad no tengo muy buen gusto por lo que lo dejo a tú criterio... Laurel– Él me guiño un ojo.

–Daphne, las dos están geniales... pero me gusta más la primera– Indicó Michell

–Vale, ¿y tú Lan?–  Mi mejor amigo seguía mirando los dos bocetos –Unh...–.

–Anda, dinos–Insistí –Mmm, la verdad las dos están super, no se por cuál–.

–Tal vez la que tenga que decidir eres tú, conoces mucho sobre los colores, gama de colores ect.– afirmó Alessandro.

–Bueno... yo opino que este está perfecto – Dije señalando con mi dedo índice el primer boceto, todos estuvieron de acuerdo, Lan vostezo –Ya es todo por hora ¿no?–.

–Si, ya Daphne  y tú ¿se van a ir juntos?– Preguntó Michell antes de que pudiera contestar mi amigo lo hizo por mi –Si, claro no la voy a dejar aquí pobresita– Menciono con cierto sarcasmo.

–¡Lan!– Trate de reprocharle con cierta risa– No. Tengo algunas cosas que hacer todavía, me hire sola– Mi amigo noto mi cambio repentino – Vale– Fue lo único que recibí – Lan, ¿Me puedo ir contigo?–  aguante una risa, Lan solo bajo la vista y murmuró un "si" De nuevo tomé mis cosas me despedí y justo cuando habri la puerta Alessandro me detuvo diciendo que quería hablar conmigo, no tuve más remedio que aceptar.

De inmediato salimos no quería ver el rostro de mi amigo conociéndolo estaría con sus estúpidas ideas locas, además lo último que quiero es verle la cara a Alessandro aunque ya paso... Podré reclamarle por lo del incidente.

–¿Y bien?– Inquiri

–Laurel... yo se que estas molesta por lo de el evento pero...– Hiva a seguir hablando cuando justo lo interrumpí – ¿Es por eso que me trajistes hasta tú auto?– puse los ojos en blanco.

–Si tan solo me dejaras explicarte–

–No hay nada que explicar, ahora las personas piensan que somos pareja o que salimos y yo... yo no quiero engañar a la sociedad–.

–No quieres engañar o no quieres sentir como la gente habla de nosotros–

–Mira yo...– Me interrumpio –Si tan solo me dejaras conocerte, eres la chica perfecta de los padres exitosos pero.... Al fin es solo una máscara, no fingas conmigo no trates ni siquiera de finguir– Por primera vez las palabras de Alessandro fueron ciertas sentí algo en el corazón que no se como describir.

Bajo la luna Donde viven las historias. Descúbrelo ahora