four

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El cuarto año de secundaria se acercaba rápidamente, y Minho y Felix seguían inseparables. Sin embargo, los sentimientos de Minho por Felix se volvían cada vez más difíciles de ignorar. Decidió que era hora de hacer algo al respecto, aunque no tenía idea de cómo expresar lo que sentía.

Una tarde, mientras Minho estaba en la biblioteca, encontró un libro sobre cómo escribir cartas de amor. Inspirado, decidió escribir una nota para Felix, pero sin revelar su identidad. Quería expresar sus sentimientos sin arriesgar su amistad.

Con cuidado, escribió la carta:

"Querido Felix, 
Tu sonrisa ilumina mis días más oscuros, y tu risa es la melodía que quiero escuchar siempre. No puedo evitar sentir que eres la persona más especial que he conocido. Me haces feliz de una manera que no puedo explicar. 
Con cariño, 
Un admirador secreto."

Dobló la carta con cuidado y la guardó en su mochila, esperando el momento adecuado para entregarla.

Al día siguiente, durante el almuerzo, Minho vio a Felix sentado solo en una mesa. Decidió que era el momento perfecto. Se acercó sigilosamente y deslizó la nota en la mochila de Felix mientras este estaba distraído con su teléfono.

Más tarde ese día, Minho observó con ansiedad desde lejos mientras Felix encontraba la carta. Vio cómo sus ojos se iluminaban y una sonrisa se extendía por su rostro al leer las palabras.

—¡Miren esto! —exclamó Felix, mostrando la carta a sus amigos—. ¡Tengo un admirador secreto!

Los amigos de Felix lo rodearon, riendo y haciendo bromas. Minho sintió una mezcla de alivio y nerviosismo. Al menos Felix parecía feliz con la carta, pero ¿qué pasaría si descubriera que él era el autor?

Esa noche, Minho recibió un mensaje de Felix.

—Hey, Minho. ¿Has escuchado de mi admirador secreto? —decía el mensaje, acompañado de una foto de la carta.

Minho fingió sorpresa y respondió rápidamente.

Wow, Felix. Eso es increíble. ¿Tienes idea de quién podría ser?

No, pero me encantaría saberlo. Es tan dulce, ¿no crees?

Minho se rió para sí mismo. Si tan solo Felix supiera.

Los días pasaron, y Minho siguió enviando pequeñas notas y cartas, siempre asegurándose de mantener su identidad en secreto. Cada vez que Felix encontraba una nueva nota, su sonrisa hacía que el corazón de Minho latiera más rápido.

Finalmente, un día, Felix decidió que ya era suficiente misterio. Reunió a todos sus amigos en el patio de la escuela y alzó una de las cartas.

—Escuchen, sé que mi admirador secreto está aquí en algún lugar. Quiero decirles algo —dijo, su voz fuerte y clara—. No sé quién eres, pero quiero agradecerte. Tus palabras significan mucho para mí. Espero que algún día puedas decirme quién eres en persona.

Minho, parado entre la multitud, sintió que su corazón se aceleraba. Sabía que tenía que ser valiente y enfrentar sus sentimientos.

Esa noche, escribió una última carta, más personal y sincera que las anteriores.

"Querido Felix, 
Soy yo, Minho. He sido yo todo este tiempo. No sabía cómo decírtelo en persona, así que lo hice de esta manera. Espero que entiendas lo que siento por ti. Eres muy importante para mí, y no quiero perder tu amistad. 
Con cariño, 
Minho."

Temblando, puso la carta en la mochila de Felix al día siguiente. Solo podía esperar que Felix entendiera y que su amistad no se rompiera por esta confesión.

serio⠀;;⠀minlix⠀⠀/ᐠ - ˕ -マDonde viven las historias. Descúbrelo ahora