i

109 12 3
                                    





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nuevo día

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Nuevo día. Nueva vida. Nueva escuela. Nueva yo.

Era lo que se había prometido Catalina para ese año.

Estaba por cumplir dieciséis años y con eso estaba decidida a reinventarse. Quería superar su doloroso pasado, marcado por la desgracia desde que cumplió catorce años. Pero eso cambiaría a partir de ahora. Había puesto un gran empeño en su recuperación; el único recordatorio de ese fatídico día eran sus padres y la dolorosa cicatriz en su pierna izquierda. Verla solo la entristecía, recordándole sus años de entrenamiento, todo el sudor y esfuerzo que había puesto en cada pirueta, en cada trazo, todo.

El médico no le aseguraba al 100% que pudiera volver a bailar, ya que su tejido nervioso no era el mismo y una mala pirueta podría volver a lastimarla. Fueron casi dos años de terapia intensiva, pero ahora estaba lista para retomar su vida. Parte de su nuevo cambio era su estética. Dejó los colores pasteles, las faldas, los moños y los tutús por un estilo más punk, con más negros, rotos, cadenas y faldas largas.

Mientras se miraba al espejo, Catalina notaba cómo su reflejo mostraba una nueva versión de sí misma. El cabello, antes recogido en elegantes moños, ahora caía libremente, enmarcando su rostro de una manera que la hacía sentir más fuerte, más decidida. Los ojos, delineados con precisión, resaltaban su mirada profunda y determinada. Las cicatrices en su pierna, aunque aún visibles, se convertían en símbolos de su resiliencia, no solo de su dolor.

perfección || rebelde wayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora