☆ ¿Quién es el culpable? ☆
Elizabeth Malfoy
31 de octubre de 1994
Hoy sería el día de la selección de los colegios. Todos estaban reunidos en el gran comedor. Nosotros nos encontrábamos en la mesa de los profesores. La copa estaba en el centro y Dumbledore comenzó con su discurso.
—Ha llegado el momento que todos estaban esperando. La selección de campeones.
Comienza a bajar el fuego de las lámparas dejando que el único resplandor sea el que emite la copa. Todos están impresionados.
Se acerca a la copa rodeándola. De repente el fuego azul se convierte en rojo y el primer papel sale cayendo en sus manos.
—El primer campeón de Durmanstrang es Viktor Krum.
El aludido festeja y con él su colegio. Era de esperarse, Viktor era un niño educado por el director al igual que nosotros.
Se acerca a Dumbledore quien estrecha su mano y lo envía frente a la mesa de los profesores.
El siguiente papelito sale de la copa.
—El campeón de Beauxbatons es Fleur Delacour.
Vuelven a celebrar y al igual que el otro se acerca estrechando la mano de Dumbledore para acabar parada junto a Viktor.
El tercer papelito sale.
—El campeón de Hogwarts es Cedric Doggory.
Más ovaciones se escuchan ya que estamos en su escuela. Nosotros seguimos sin decir nada. Agata parece querer dormirse. No lo hemos hecho últimamente.
El chico se acerca a los otros dos chicos.
—Excelente. Ya tenemos a nuestros tres campeones. Pero al final solo uno escribirá su nombre en la historia. Solo uno levantará este cáliz de campeones.
El ministro se acerca con el cáliz cubierto poniéndolo en una mesa frente a la de los profesores.
—Este objeto de victoria. La copa de los tres magos.
Se mueve revelando la copa y todos se quedan asombrados. Nosotros ya la habíamos visto. El ministro no la enseñó ayer antes de guardarla.
De repente Severus se acerca a la copa que vuelve a sacar las chispas volviendo rojo el fuego. Sacando otro papelito.
Dumbledore lo lee y se queda atónito por un momento.
—Harry Potter. —Lo dice en un susurro. Para luego alzar un poco más la voz. —¡Harry Potter!
Los murmullos comienzan, el chico se esconde y Hagrid comienza con el dramatismo. La conmoción hace que Agata a mi lado reaccione. Solo la miro sin decir nada. Esto no fue obra de nosotros.
Me iría para ahorrarme todo el pleito que se viene, pero hacerlo sería sospechoso. Entonces permanezco aquí. Artem se coloca junto a mi y Maxim al lado de Agata.
—¡Harry Potter!
Los gritos se hacen más crueles y Hermione es la que lo hace reaccionar. Chica inteligente.
Con cuidado se acerca a los otros tres campeones. Yo me acerco a su lado guiandolos a la la sala de las copas.
En el gran salón todos se quedan criticando. Harry viene justo detrás de nosotros. Yo me muevo más rápido con los campeones detrás. Entre mayor preocupación mostremos mejor será la reacción.
—¿Qué pasó Dumbledore?
—No lo sé.
—Debes decirme qué pasó. Creó que nos debes una explicación.
—Jamás había sucedido algo así.
Minerva está bastante conmocionada.
—¿Harry tú pusiste tu nombre en el cáliz de fuego?
—No señor.
—¿Le pediste a algún estudiante que lo hiciera?
—No señor.
—¿Estás absolutamente seguro?
—Si. Si señor.
Llega la directora de Beauxbatons estando demasiado alta para la lámpara que termina pagando el coraje.
—Miente. Miente, estoy segura.
—Claro que no. El cáliz de fuego es un objeto excepcionalmente poderoso. Y solo un potente hechizo para confundir podría engañarlo. Y además es magia muy avanzada para un jovencito.
Alastor interviene haciendo que la atención se dirija a él.
—Parece que sabes mucho de esto Mody.
—Mi trabajo era pensar igual que lo hacen los magos tenebrosos.
—Esto no nos ayuda en nada. Tú decides Barty.
El ministro se acerca a nosotros, que estamos apartados de la discusión. Nos mira antes de decir su decisión.
—Las reglas son absolutas. El cáliz de fuego tiene inapelable mente la decisión. El señor Potter no tiene salida. Es aparte de hoy otro participante del torneo.
Todos volteamos a verlo con pena. Nadie debería pasar por cosas así. Pero bueno, qué podemos hacer.
El ministro se acerca a nosotros. Antes de que hable ya se lo que dirá.
—Necesito que los ayuden un poco. Sabe menos que el resto. Se que podrán.
—Ese es un gran pedido, ministro. Sabe que mi familia y la suya no se llevan bien. Si algo le sucede al chico creerán que fue mi culpa. No estoy negada a ayudarlo, pero le enseñaré lo necesario para que al menos lo intente.
—Antes que nada debemos enviar el aviso del cambio a nuestra directora. Cómo saben estamos aquí gracias a ella. Esto no estaba dentro del plan.
Artem se coloca a mi lado izquierdo.
—Tal vez lo ayudaremos en un espacio público. A la vista de todos para que no nos hagan responsables de nada.
La directora de Beauxbatons vuelve a intervenir.
—Estos chicos tienen magia muy avanzada en sus manos. Quién nos asegura que no fueron ellos los que pusieron el nombre del chico en el cáliz.
Maxim es el que responde.
—Con todo respeto. ¿Eso en qué nos beneficiaría? Nosotros podemos irnos, no es nuestro problema que su colegio no esté asegurado.
—Maxim tiene razón. Cómo ya les dije yo no tengo ningún problema con el chico. Pero si eso nos traerá problemas a nosotros prefiero irme. Y buscar otro candidato de las escuelas que no hemos visitado aún.
Todos se quedan en silencio. El ministro es el que se mueve. Nosotros avanzamos detrás de él por qué aquí ya me desesperan. Ni que yo fuera la culpable mi objetivo no es hacerle daño a Potter como todos creen que pasará.
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La vida de una mentira -Historia Pausada- (Reescribiendo)
FanfictionElizabeth Malfoy es la única hija de Larissa Black un pecado por el que su madre acabo siendo repudiada, despues de su muerte ella promete no dejar que olviden el daño que le hicieron a su inocente madre. "Nadie olvidará el triste rostro de mi madre...