La calamidad espiritual, ese fue el nombre que se le dió a ese suceso que ocurrió hace 20 años.
Los espíritus descontrolados no tuvieron piedad, destrozaron ciudades y acabaron con la vida de muchas personas inocentes. El paisaje en el país de Surey...
El viaje acaba de empezar, pero antes de seguir por este sendero para llegar a Sunrise, hay un lugar que debo visitar.
- Sicily, tomaremos un pequeño desvío, ¿de acuerdo? Quiero ir a ese lugar, después de que nos alejemos de aquí no los podré visitar en un largo tiempo. - Dije mientras la observaba.
- Me parece bien, yo también considero que eso será lo correcto. - Dijo con una sonrisa.
- En ese caso, está decidido, si mantenemos este ritmo llegaremos en un par de minutos. - Continúe.
- No hace falta decirlo, pero igualmente lo diré, mantente alerta a los alrededores, no se han visualizado muchos espíritus por está zona en los últimos meses, aún así, no podemos bajar la guardia.
- No te preocupes, soy consciente de ello, cariño, sabes de sobra que mis sentidos son muy agudos, no dejare que ningún espíritu nos atrapé desprevenidos. - Dijo segura de si misma.
- No me cabe la menor duda de eso, conozco mejor que nadie tus capacidades, sé perfectamente de lo que eres capaz.
La conversación se detuvo y seguimos nuestro camino. Los minutos pasaron en un abrir y cerrar de ojos, ya hemos llegado a nuestro destino.
Sin perder ni un segundo, Sicily y yo entramos al lugar y caminamos hacia un punto en específico.
- Ha pasado un tiempo, unos tres meses aproximadamente, disculpen que no haya venido a visitarlos durante ese tiempo, tenía que organizar mis ideas para venir a contarles todo. - Dije mientras observaba las tumbas.
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Frente a mí tengo las tumbas de las personas que cuidaron de mí.
Elizabeth y Andrew Taylor, un matrimonio unido que no tuvo hijos, pero que la presencia de cierto chico en su hogar era como si hubiesen tenido uno.
A pesar de no compartir lazos de sangre, ellos dos me cuidaron y me trataron como si fuera su hijo.
Gracias a ellos nunca me faltó nada, estudios, comida, dinero, ellos me apoyaron en todo, les estoy completamente agradecido por eso.
En ese momento, Sicily junto sus manos, luego agachó levemente la cabeza y cerró sus ojos.
- Tiempo sin verlos, Elizabeth, Andrew, mi relación con Izumi sigue de maravilla como siempre, así que no deben preocuparse, seguiré a su lado y lo protegeré por ustedes. - Dijo Sicily con una sonrisa.
Ya han pasado seis meses desde que fallecieron, ambos se fueron de este plano el mismo día, ese hecho me pareció increíble, el lazo que los unía era realmente fuerte.
