Frio

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 Oscuridad, eso fue lo que vi al momento de recobrar el sentido, no sabía si me encontraba despierto o todavía seguía en un sueño y no había despertado realmente. No sentía nada, intente moverme, pero de alguna manera mi cuerpo se negó a responder, estaba confundido, no podía ver nada, no podía sentir nada, mi cuerpo no podía moverse. Quise gritar, pero mi voz fallaba solo pude escuchar el ligero y apagado aliento, escuchar... Pude darme cuenta que mi oído funcionaba, eso me decía que estaba despierto, esto no era un sueño, esto era real.

 Aquelpensamiento solo me llevó a un estado de miedo más que de tranquilidad, nosabía en donde me encontraba, no sabía cómo había llegado a esta tortuosasituación, mi mente estaba completamente en blanco como si todos mis recuerdoshubieras desaparecido de mi ser. Poco a poco mi angustia crecía, no escuchabanada a mi alrededor estaba completamente solo, quería llorar más las lágrimasno salían de mis ojos... la angustia dominaba por completo mi cuerpo. 

 Sentíde manera repentina un hormigueo en mi espalda, bajo desde mi coxis hasta minuca aquello me advirtió que la sensibilidad en mi cuerpo comenzaba a volver,pero aquello en vez de calmarme solamente me hizo asustarme más, lentamentecomenzó a sentir mies, aquello me dijo que estaba descalzo pero aquello no sedetuvo únicamente ahí, comencé a sentir como mis piernas sentían una superficielisa y completamente helada, no solo no estaba en mi cama, estaba desnudo en loque parecía ser una camilla metálica, el miedo aumentaba a medida que lasensibilidad recorría nuevamente mi cuerpo por completo, podía sentir el aireque recorría la sala envolviendo el cuerpo por completo, podía sentir como micuerpo se apoyaba en el duro material en el cual me encontraba acostado masnada me podía calmar, ya que a medida que mi cuerpo recuperaba el control de síy volviendo a mi control, también otro sentido hizo acto de presencia en todomi cuerpo.

 En todas mis extremidades podía sentir lo queúnicamente podía ser descrito como un dolor agudo he incesante, quise movermepero cuando lo intente aquel sentido únicamente aumentó de manera que nadiepodría soportarlo, quise gritar pero mi voz no salía del todo, las lágrimascomenzaron a salir de mis ojos de forma descontrolada por el dolor, laslagrimas ardían, aquello era como si me rociaran agua ardiente en el rostro loque únicamente aumentaba mi paranoia y mi angustia, pude notar como de misbrazos escurría un líquido cálido que bajaba y se desparramaba por toda lacamilla, nuevamente intente mover mis brazos aguantando el inquietante dolor quehacía que más lágrimas brotaran de mis ojos. Pude darme cuenta que mis brazosestaban anclados con una especie de ganchos que se encontraban incrustados enmi piel, atravesando mis venas, mis piernas estaban atadas con correas, eldolor iba en aumento.

 De pronto pude escuchar como una puerta se abría de forma lenta con un sonido chirriante, mi cuerpo de forma repentina comenzó a temblar a medida que distintos pasos daban vueltas alrededor de mi. Sentí como una mano se posaba de manera delicada en mi pierna derecha y lentamente comenzó a subir, el miedo estaba en su punto máximo únicamente superada por el dolor al momento en el cual aquel tacto pasó por mi brazo tocando de manera juguetona los ganchos que atravesaban mis extremidades para después acariciar de forma sutil mi pecho llegando a mi cuello. Justo cuando pude recobrar mi voz. 

"Tengo frío".   



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⏰ Última actualización: Jul 22 ⏰

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Cuentos de mi puño y menteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora