Capítulo 44

4 2 1
                                    

Porfin. Ya era su cumpleaños. A las doce en punto, los dos primos se abalanzaron sobre ella (con precaución de su brazo, etc) y la felicitaron entre abrazos. Aunque, por alguna extraña razón, ella también deseaba que fueran besos. ¿Que la pasaba? Por la mañana, en el instituto, recibió un mensaje de desconocido.

---------------------------------------------------------------------------------

Tonto: Hey pecas, hoy porfin me conoces

Lucía: Sisisisisisisisisisisisisisisisis porfin, cuando????

Tonto: cuando toque el timbre del final de clases, en la sala de música.

Lucía: está biennnnnnnnnn, que ganassssss

Tonto: ay, que tonta. Bueno chao.

Lucía: luego nos vemosssssssssss

Tonto se desconecto

Lucía se desconecto

---------------------------------------------------------------------------------------

Lucía paso todo el día super desconcertada. ¿Quien sería? ¿Quien puede ser? Durante la clase de biología, esperando a que el profesor llegará, no podía parar de hablar, y Justin era su víctima.

-Por fin le voy a conocer. ¿No es genial? El piensa que le voy a rechazar, y no puede ser tan malo como para que después de estar hablando tanto tanto tiempo y de todo lo que hemos pasado, le rechaza, ¿No crees? ¿Tú quién pienses que es? Un día me dijo que compartíamos un par de clases? ¿Cuál seran? Yo comparto biología y lengua con dos, matemáticas y música con otros días, inglés y educación física con otro...-

El profesor llego e interrumpió la conversación. Entregaron sus trabajos debido a que era ya viernes, y, como era de esperar, el trabajo del rubio y de la pelirroja era un diez alto. Lucía estaba impaciente. Biología era la última clase del día. Y si, tan mala era su suerte que tenía a primera y a última, y el profesor decidió que los trabajos se entregarían en esta última hora.

Se notaba el nerviosismo de Lucía. Y, disimuladamente, también el de Justin. ¿Que me diría ella al conocerlo?

Al fin. Sonó el timbre. Lucía salió pitando. Justin también, aunque no sospecho porque era normal en el. Lucía vio por el pasillo a Luca: su segunda víctima. Me contó el mismo rollo que a Justin, aunque de pronto, se interrumpió a su misma con un: "ay, me voy pitando" Ambos se despidieron y Luca se fue a paso tranquilo a ver el encuentro disimuladamente desde atrás.

Lucía corrió hasta la puerta de la clase de música. Estaba cerrada. Y la luz apagada. Se distinguía una figura dentro. De repente, temió que fuera una broma de mal gusto y que solo fuera el profesor. Un mensaje la interrumpió.

Tonto: a qué esperas pecas? De repente dudas?

Lucía: si, podría ser una broma de mal gusto

Tonto: eres más boba de lo que creía, abre ya, te estoy esperando

Lucía apagó el móvil sin contestar. Se sentía más nerviosa que nunca.

Abrió la puerta. Presionó el interruptor y encendio la luz. Al fondo de la clase, sentado en una mesa, había un chico de espaldas. Era rubio. Con el pelo largo. De repente, sintió náuseas, ¿Era Justin? Eran náuseas en el buen sentido. ¿Sería el...? Solo le tocaba averiguarlo. Entro y cerró la puerta tras de si.

-Hola pecas- entonces, el chico se bajó de la mesa, y aún de espaldas, se puso de pie.

-Venga hombre, no alargues más este momento- Lucía se hacerco a el. Estaban a centímetros de distancia. Al ver qué en muchacho no se daba la vuelta, lo hizo ella, y, se quedó paralizada al ver la ruborizada cara de Justin.

Idiota está escribiendo [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora