Después de su victoria sobre el Guardián del Tiempo, Abbie y Ian decidieron construir un santuario en su planeta natal, donde pudieran compartir su amor y su sabiduría con otros. El santuario se convirtió en un lugar de peregrinación para aquellos que buscaban el amor verdadero.
Un día, una joven llamada Astrid llegó al santuario, buscando orientación. Abbie y Ian la recibieron con los brazos abiertos y le compartieron su historia. Astrid se inspiró en su amor y decidió encontrar su propio camino.
Abbie y Ian también crearon un jardín de estrellas en el santuario, donde plantaron una estrella por cada pareja que se había enamorado gracias a su inspiración. El jardín se convirtió en un símbolo del poder del amor.
Años después, Abbie y Ian se convirtieron en ancianos sabios, pero su amor seguía siendo fuerte. Se sentaban en el jardín de estrellas, mirando las estrellas que habían plantado, y recordaban su épica aventura.
Un día, Abbie se volvió hacia Ian y le dijo: "Mi amor, hemos vivido una vida llena de aventuras y amor. ¿Qué más podríamos pedir?". Leo sonrió y respondió: "Nada, mi amor. Estoy completo contigo".
Y así, Abbie y Ian se abrazaron por última vez, rodeados de las estrellas que habían inspirado a tantos. Su amor se convirtió en una leyenda que brillaría por toda la eternidad.
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El Jardín Escondido
FantasyLeo descubre un hermoso jardín escondido en el bosque, donde encuentra una fuente y una figura de piedra de un ángel. El ángel le enseña a Leo la importancia de la paciencia y la reflexión, y le revela que la paciencia es la llave para desbloquear l...