Rey Mago -HIATUS-

Capítulo 49: La Reina

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Apareciendo fuera de un gran y gran palacio, Harry miró a los residentes reales, el Palacio de Buckingham. El lugar era muy enorme, compuesto de piedra de mármol blanco con intrincados diseños hermosos, una azotea abierta en la parte superior y un balcón justo en el centro del primer piso. Las puertas de acero negro bloquean todas las entradas desde el interior, ya que la planta baja se extiende por más de 100 metros de largo con ventanas interminables que bordean los dos primeros pisos.

Llegando a la puerta de entrada principal con una R de oro y una corona en la parte superior, dos guardias reales llamaron la atención con rifles en la mano, y se les permitió la entrada sin decir una palabra.

Al entrar en el patio había hermosas flores en flor y una gran estatua estaba en el centro, llegaron a la puerta interior donde había filas de guardias reales alrededor de la premisa, todas tan rígidas como las estatuas mismas.

Una vez más, se les permitió entrar sin un control válido de identidad o de armas, ya que la puerta interior se abrió ampliamente para ellos. Finalmente, al entrar en el palacio cuando las criadas y mayordomos los saludaron en la puerta principal, se acercaron a una gran escalera con diseños dorados que lo alineaban todo, un techo de cristal de cúpula arriba, alfombras rojas dispuestas y retratos que se alinean en toda la pared.

"Si me siguieras", dijo el mago mientras los conducía por pasillos sinuosos con obras de arte y esculturas aún más lujosas. Finalmente, se acercaron a una puerta grande con hermosos diseños con incrustaciones donde dos guardias reales lo vigilaban obedientemente.

"Su majestad te espera adentro", dijo el Jefe Mago mientras señalaba hacia la puerta.

Llegando a una pausa unos pocos pies antes de la puerta, Sirius habló, "Si pudieras darnos unos momentos."

"Por supuesto", dijo el hombre con un guiño.

Dándose la vuelta para enfrentarlo, Sirius puso un Encanto Muffliato para que su conversación no pudiera ser escuchada. "Muy bien escucha, cachorro," comenzó con, "No sé lo que quiere la reina ya que la familia real no ha participado realmente en el mundo mágico durante cientos de años."

"Debe ser muy importante", Harry asintió con la cabeza, "o más probablemente ella quiere algo de nosotros."

"Sí, lo que me preocupa, pero sigue siendo respetuosa con ella, ella es la gobernante de este país y le debemos un homenaje."

"Muy bien", dijo Harry con un guiño en la cabeza. Luego, caminando, indicó con la cabeza, "estamos listos para conocer a la Reina.

Señal al guardia para abrir la puerta, entraron en un salón blanco con una pizca de oro arrojada mientras decoraciones caras y piezas invaluables cubrían el lugar. Dos guardias que ahora que tenía una mirada más cercana a él con su Magic Sight, vieron que eran en realidad magos.

"Manos por favor", habló uno de ellos mientras ambos extendían sus manos.

"Ja," Sirius se rió entre dientes mientras entregaba su varita como lo hizo, pero simplemente no pudo evitarlo mientras avanzaba. "Si crees que no puedo soportarlo sin mi varita, entonces están muy equivocados."

Al no decir nada en respuesta, pasaron junto a ellos y sentados en el medio de la habitación había una mujer mayor de unos sesenta años bebiendo té de una taza de porcelana dorada. Al verlos entrar, sonrió un poco e indicó a las sillas antes que ella.