🥀 Capítulo 20 :

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Han pasado dos días de mi graduación, y aún no caigo. Ya no me tengo que levantar temprano para ir a la Uni, ya no tengo que hacer tareas y trabajos prácticos, ya no voy a ver tan seguido a mis amigos.

Estoy en la habitación, con Adán, preparando nuestros bolsos para irnos de viaje. Con los chicos decidimos irnos un finde a un pueblo llamado Arcos de la Frontera, se veía muy lindo, y se encontraba en la provincia de Cádiz, asentado en lo alto de una colina dominando una hoz del río Guadalete. Es uno de los pueblos más bonitos de España. 

- Que más te falta amor?- pregunté.

- Creo que nada más.- reviso todo nuevamente.

- Okey, los chicos dicen que ya van a salir  en un rato, así partimos cuánto antes.- asintió.

Bajamos nuestros bolsos al living, preparamos algo para comer y guardamos galletas y un poco más de comida para el viaje. En total, teníamos seis horas y media en auto. Salimos de la casa con los bolos, la comida y todo lo que llevábamos. Íbamos a ir separados. Las chicas irían con Antonio en su auto y Adán y yo en el de el. La idea era vernos ya en Arcos, o juntarnos en algún punto medio del caminó.

- Amor, tienes todo guardado?- preguntó Adán.

- Si, todo listo.- respondí.- Ya podemos irnos.- asintió metiéndose al auto.

Salimos de la casa y emprendimos marcha rumbo a Arcos de la Frontera. Era mi primera ves viajando tan lejos en mi mismo país, si bien el año pasado habíamos viajado a Argentina, eso ya era otro país distinto. Pero dentro de España, nunca había viajado tan lejos y les digo que parecía una niña de diez años, por la cantidad de veses que le pregunté a Adán cuánto faltaba para llegar.
El viaje era largo, muy largo. Puse mi playlist de Morat en el auto porque me estaba matando el aburrimiento. También había llevado un libro, así que trate de leer, pero había cosas que me molestaban, a) que por el movimiento me perdiera, b) que por el movimiento se me revolviera el estómago y me dieran náuseas y c) leer en un auto es incómodo. Así que definitivamente además de escuchar música y hablar con Adán no podía hacer.

- Intenta dormir amor.- pegue un salgo cuando oí su voz de la nada.

- Ay, me asustaste.- se rió.- Si, está bien, intentaré dormir...pero, cuánto queda?- pregunté.

- Quedan seis horas para llegar aún.- una banda.- Trata de dormir.

Asentí.

                            Adán:

La idea principal de este viaje era la propuesta de matrimonio para Chiara. Pero claro, ella no tenía idea, solo creía que era un viaje de finde semana con sus amigos y conmigo. Y la verdad... Ella se creía que sus amigos vendrían, pero no lo harían. Al llegar  al lugar ellos le mandarán un mensaje diciendo que a António se le rompió el auto o algo de eso y no podrán venir. Así que estaríamos solos y yo llevaría a Chiara a un lugar a cenar, luego iríamos a una especie de mirador y allí le haría la propuesta.

Al llegar a Arcos de la Frontera, Chiara aún dormía, así que no la desperté hasta que llegamos al hostal donde nos quedaríamos.

- Amor despierta, hemos llegado.- la moví un poco.

- Mhmm...- se pasó las manos por la cara.- Ya? Tan rápido ? Que hora es?

- Son las 20:38 amor.- baje del auto y di la vuelta.- Ven, vamos a registrarnos en el hostal.

- Y los chicos?- miró a los lados preocupada.- ¿Se habran perdido?

Agarró su celular y pareció muy triste cuando lo vio. Me enseñó un mensaje de António que decía:

Entrelazados Por El Destino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora