La mañana siguiente, el sol se filtraba suavemente a través de las cortinas, iluminando el rostro de Jane y Lisbon mientras dormían, entrelazados bajo las sábanas. Jane fue el primero en despertar, y durante un momento simplemente observó a Lisbon, su respiración tranquila y su rostro relajado. Sintió una oleada de felicidad al saber que finalmente estaban juntos de una manera completa.
Lisbon se movió ligeramente, abriendo los ojos para encontrar a Jane mirándola con una sonrisa.
- Buenos días, detective -dijo Jane, besándola en la frente.
- Buenos días, Patrick -respondió Lisbon, sonriendo mientras se estiraba.
Se quedaron en la cama un rato más, disfrutando de la compañía mutua antes de levantarse y comenzar el día. A pesar de la magia de la noche anterior, sabían que debían enfrentarse a la realidad de su trabajo en el CBI y las complicaciones que su relación podría traer.
En el CBI
Cuando llegaron a la oficina, todo el equipo notó el cambio en Jane y Lisbon. Había una nueva energía, una conexión más evidente entre ellos. Aunque intentaron mantener las apariencias profesionales, las miradas y sonrisas cómplices no pasaron desapercibidas.
- Parece que alguien tuvo una buena noche -murmuró Cho a Van Pelt, quien sonrió en respuesta.
Lisbon llamó a una reunión para discutir el próximo caso. Mientras hablaba, Jane la miraba con admiración y cariño, un sentimiento que no podía esconder.
- Jane, ¿tienes algo que añadir? -preguntó Lisbon, notando su mirada y sonriendo ligeramente.
- No, Teresa. Solo estoy de acuerdo con todo lo que dijiste -respondió Jane con una sonrisa.
La reunión terminó, y el equipo se dispersó para comenzar a trabajar en el nuevo caso. Jane y Lisbon se quedaron atrás, tomando un momento para ellos.
- Patrick, tenemos que ser cuidadosos. No quiero que nuestra relación afecte nuestro trabajo -dijo Lisbon, preocupada.
- Lo sé, Teresa. Pero también creo que podemos manejar esto. Somos un buen equipo, tanto en el trabajo como fuera de él -respondió Jane, tomando su mano.
Lisbon asintió, sintiéndose más segura con Jane a su lado. Sabían que habría desafíos, pero estaban dispuestos a enfrentarlos juntos.
Esa noche, en casa de Jane
Después de un largo día en el CBI, Jane invitó a Lisbon a su casa nuevamente. Esta vez, preparó una cena más elaborada, queriendo sorprenderla. Mientras cocinaba, Lisbon lo observaba desde el sofá, admirando su habilidad y dedicación.
- ¿Quién iba a pensar que el gran mentalista también es un excelente cocinero? -dijo Lisbon, riendo.
- Hay muchas cosas que aún no sabes de mí, Teresa -respondió Jane, guiñándole un ojo.
La cena fue perfecta, llena de risas y conversaciones profundas sobre sus sueños y esperanzas para el futuro. Después de la cena, se acurrucaron en el sofá, disfrutando de la tranquilidad y la cercanía.
- Patrick, he estado pensando en lo que dijiste sobre construir un futuro juntos. Quiero eso también. Quiero que seamos felices, sin importar lo que pase en el trabajo -dijo Lisbon, apoyando su cabeza en el hombro de Jane.
- Y lo seremos, Teresa. Te prometo que haremos esto funcionar -respondió Jane, besándola suavemente en la frente.
En el trabajo, al día siguiente
La relación entre Jane y Lisbon continuó creciendo, y aunque intentaban mantenerla privada, sus compañeros notaban la diferencia. Cho, Van Pelt y Rigsby, aunque curiosos, respetaron su espacio, sabiendo que sus jefes necesitaban este tiempo para ajustarse a su nueva dinámica.
Mientras trabajaban en el nuevo caso, Jane y Lisbon encontraron maneras de apoyarse mutuamente, tanto profesional como emocionalmente. Cada pequeño gesto, cada mirada y sonrisa, reforzaba su conexión y les recordaba por qué estaban juntos.
Una tarde en el parque
Unos días después, decidieron tomarse una tarde libre y fueron al parque. Caminaban de la mano, disfrutando del sol y de la compañía mutua. Jane compró helados y se sentaron en un banco, viendo a la gente pasar.
- Esto es agradable -dijo Lisbon, disfrutando de su helado.
- Lo es. A veces necesitamos recordarnos a nosotros mismos que hay más en la vida que el trabajo y los casos -respondió Jane.
Se quedaron en silencio por un momento, simplemente disfrutando del momento. Luego, Jane se volvió hacia Lisbon, tomando su mano.
- Teresa, quiero que sepas que, pase lo que pase, siempre estaré a tu lado. Te amo y estoy comprometido con nosotros, con nuestro futuro -dijo Jane, mirándola a los ojos.
Lisbon sintió una calidez en su corazón, sabiendo que estaba con el hombre que amaba.
- Yo también te amo, Patrick. Y estoy dispuesta a hacer lo que sea necesario para que esto funcione. Juntos podemos enfrentar cualquier cosa -respondió Lisbon, apretando su mano.
Con el sol poniéndose a su alrededor, Jane y Lisbon se besaron, sellando su compromiso de amor y dedicación. Sabían que su camino no sería fácil, pero estaban listos para enfrentarlo juntos, fortalecidos por el amor que compartían.
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Eres Tu Lo Que Yo Deseo
FanfictionSu amor y compromiso les han permitido superar cualquier desafío, y juntos, construyen un futuro prometedor. Capitulos alternativos después de 24×4