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Mis manos sostienen fuertemente las caderas de Lisa mientras la ayudo a cabalgarme, aunque en realidad ella no lo necesita

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Mis manos sostienen fuertemente las caderas de Lisa mientras la ayudo a cabalgarme, aunque en realidad ella no lo necesita. Sus piernas son fuertes, sabe como moverse, esa mujer realmente sabe lo que hace. Sus movimientos están haciendo que me sienta en las nubes. Y los besos de Jungkook en mi cuello, quien está atrás de mí, hacen que me eleve aún más.

—!KIM TAEHYUNG!— el grito de Jimin hace que me asuste y lo miro molesto. —!Diablos! ¿Qué pasa contigo? Llevo llamándote casi 5 minutos pero estás en quien sabe donde.

— ¿Que pasó? — pregunto aún aturdido.

—Te estaba hablando para avisarte que la comida ya llego, pero necesito que vayas por ella porque Yoongi me pidió que le llevara este USB que olvidó aquí.

—¿A donde se la llevarás? ¿A su habitación? —subí y bajé mis cejas y él me miró con odio.

—A su estudio graciosito, está aquí, ¿bueno vas a ir o no por la comida? —se cruzó de brazos.

—Si, dime el código, y donde debo recogerla.

—En la puerta trasera número 2, ya sabes, la que usamos siempre para recibir pedidos, oh y el código es 013027.

¿Casualidad o destino?

—Está bien, ¿comeremos aquí?

—Si, aún nos falta ensayar Butter y luego volvemos con Permission to dance que creo que aún nos falta perfeccionar algunos pasos un poco más.

Estábamos en el estudio de baile de la empresa, ya que quería que Jimin me ayudara a ensayar las coreografías para que me dijera en que puedo mejorar, como lo hemos hecho en este largo viaje juntos. Aunque ahora más que para perfeccionar mi baile, necesitaba esto para despejar mi mente de lo que había pasado hace apenas una semana.

Realmente fuimos muy ilusos al creer que esa noche no cambiaría nuestras vidas para siempre, porque lo hizo, vaya que lo hizo. 

Por la mañana Jungkook y yo amanecimos abrazados en la enorme cama, sin ningún rastro de Lalisa por ningún lado. Nuestra amiga tailandesa se fue, sin hacer ruido y sin dejar alguna evidencia de que ella estuvo ahí más que su aroma en aquellas blancas sabanas. Jungkook y yo nos miramos confundidos al percatarnos que ella no estaba ahí, que se fue sin avisarnos.

Pero comprendimos que no era muy lógico de nuestra parte pensar que íbamos a amanecer los tres desnudos abrazados bajo las sábanas, cuando se supone que el nuestro encuentro fue meramente sexual, sin ningún tipo de romanticismo de por medio. Pero eso no evitó sentir un poco de vacío en el pecho al no tenerla con nosotros un poco más.

Ni Jungkook ni yo hemos querido aceptar y hablar sobre ello pero es evidente, que nuestra relación cambió a partir de ese día. Nuestra intimidad que creíamos estaba en su mejor momento luego de cumplir todas nuestras fantasías, se volvió casi nula en esta semana, cuando antes del cumpleaños de Jungkook era una actividad diaria.

Solo hemos estado juntos en dos ocasiones esta semana, porque la primera vez ninguno de los dos se sintió satisfecho completamente, y aunque culpamos al cansancio en nuestros cuerpos después de un día de ensayos intensos ambos sabíamos que ese no fue el motivo real. Y la segunda vez que lo hicimos, fue precisamente ayer, que llegamos al orgasmo, y todo fue como en todas nuestros años juntos. Maravilloso placentero pero aún así, sentimos que faltaba algo más.

—Bueno deja voy a recoger la comida entonces —le dije parándome del suelo y acercándome al espejo enfrente del cual dejé mi mochila para agarrar mi cubrebocas y mi gorra. —Y mientras yo voy por ella, tú vas con Yoongi a su estudio, completamente solo, solo no te tardes tanto que te quedarás sin comer, aunque bueno puedes quedarte junto a hyung y comer otras cosas.

Y con una sonrisa pícara vi como la cara de mi mejor amigo se puso roja completamente en un segundo por el espejo frente a mi. Y antes de que pensara golpearme salí corriendo de ahí entre risas escuchando otra vez un grito de mi nombre completo.

 —Ya no tienes hambre supongo —fue lo primero de dije apenas entro el pequeño mochi al estudio

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—Ya no tienes hambre supongo —fue lo primero de dije apenas entro el pequeño mochi al estudio.

—Cállate y dame mi charola —respondió, y por el tono en su voz se notaba triste. Luego de que se sentó en el suelo junto a mi, empezó a comer su comida sin decir nada, solo concentrándose en comer y ver la comida como si fuera lo más interesante del mundo.

—¿Que pasó con hyung? —le dije luego de unos minutos de comer en silencio.

—Ni yo se. Es que llegue y estaba sentando frente a su computadora así que me acerqué para entregarle la memoria, me agradeció, y luego yo ya me iba a dar vuelta para irme pero me dio curiosidad de saber que era lo que estaba componiendo así que le pregunté, y me dijo que estaba ayudando a Jungkook con una canción. Pero según yo Jungkook no está haciendo ninguna canción en estos momentos ¿no?

—Que yo sepa no —le respondí fruncieron el ceño pensando si acaso Jungkook me oculto eso, pero no creo, confío en mi hombre.

—Bueno, yo tampoco, es por eso que le dije que me estaba mintiendo que me dijera que canción era, y me dijo que no. Puedes creerlo? Me dijo que no. Así que no le dije nada más y me di media vuelta para irme pero él me sujeto la mano y me detuvo, yo volteé rápido pensando que estaba todavía sentando en su silla pero no. Estaba de pie justo enfrente de mi. Quedamos a centímetros, Taehyung, centímetros! Podía sentir su respiración. Creí por un momento ver de nuevo ese brillo que había en sus ojos cuando me miraba cuando éramos pareja.

—¿Y se besaron? —no pude contener la emoción.

—No —dijo y toda la emoción y brillo de esperanza que había en sus ojos se esfumó en menos de un segundo. —Alguien paso por afuera de la puerta del estudio y el ruido hizo que Yoongi diera inmediatamente un paso hacia atrás, luego solo me dijo gracias y se sentó de nuevo en su silla y se puso sus audífonos. Yo no dije nada más y me fui casi corriendo de ahí.

—Aún no entiendo porque ustedes se separaron si es claro que todavía se aman.

—A veces el amor no lo es todo, Taehyung.

Y yo en ese momento no lo entendí, pero más adelante si.

Y yo en ese momento no lo entendí, pero más adelante si

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Más que una fantasía - Taeliskook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora