Five Nights at Freddy's HISTORIAS DEL PIZZAPLEX #6: NEXIE

NEXIE

Astrid y su abuelo están en la Boutique Buddytronics de Pizzaplex observando cómo se fabrican los robots. Los Buddytronics tenían una programación avanzada para que pudieran actuar como el mejor amigo de una persona, así como responder a alguien de forma orgánica en lugar de repetir líneas preprogramadas. Mientras que muchos de los otros niños de la escuela tenían Buddytronics, Astrid no podía permitirse uno y tenía que hacer tareas en la granja de su abuelo sueco para conseguir dinero. Su "farfar", como lo llamaba, tampoco entendía realmente el atractivo de la tecnología moderna, pero respetaba el interés de Astrid en ella.

Muchos de los niños que conocía tenían sus propios Buddytronics y los llevaban a la escuela, incluso si ya no estaban de moda. Astrid quería su propio Buddytronic para encajar, pero también porque no había hecho ningún amigo de verdad debido a que sus compañeros de clase la marginaban. Se acercaba su cumpleaños y su familia extensa probablemente le iba a regalar varias chucherías y ropa que ellos mismos hacían a mano, pero ella escribió a los diversos miembros para convencerlos de que le dieran dinero en su lugar, inventando la mentira piadosa de que quería aprender a invertir en cosas. Solo unos pocos de ellos terminaron dándole dinero a Astrid, dejándola con 120 dólares menos que el precio de mil dólares de un Buddytronic. Mientras Farfar cortaba su pastel de cumpleaños, Astrid de repente comenzó a llorar. Al darse cuenta de por qué lloraba, Farfar se ofreció a pagar el resto de los fondos para comprar un Buddytronic, creyendo que se merecía tener algo que quería.

Astrid y Farfar llegaron al Pizzaplex y notaron una conmoción cerca. Un niño estaba atrapado en una cúpula de cristal, con docenas de curiosos observando y varios empleados del Pizzaplex corriendo hacia la cúpula. Las luces de los distintos juegos, tiendas e incluso el Árbol del Cuentacuentos se apagaron brevemente antes de volver a encenderse. La extraña subida de tensión también estaba afectando a los sistemas de la Boutique Buddytronic. Los empleados querían cerrar temprano, pero Farfar los convenció de permanecer abiertos el tiempo suficiente para que Astrid pudiera hacer su Buddytronic. Seleccionó las distintas piezas con la imagen ideal de su nuevo amigo en mente: una muñeca que se pareciera a su madre.

Con una sola imagen como referencia, Astrid recordó su brillante cabello rubio, ojos azules y cara de muñeca. Había abandonado a la familia para convertirse en modelo, y Farfar tuvo la amabilidad de acoger a Astrid y a su padre. La Buddytronic de Astrid, a la que planeaba llamar Lexie, era similar en apariencia a su madre, con su cabello rubio trenzado y vistiendo un atuendo azul oscuro. Una vez que se realizó el proceso, Lexie estaba completa. Sin embargo, debido a los breves cortes de energía, los sistemas fallaron durante el proceso. Lexie salió con una cara asimétrica, un cuerpo desproporcionado y un vestido roto. La programación también falló, y la muñeca dijo que su nombre era Nexie. A pesar de sus defectos, Astrid sintió una conexión con la muñeca y estaba dispuesta a quedarse con ella. Racionó que si no lo hacía, no sería mejor que su madre.

Al día siguiente, Astrid conoce a su nueva amiga. Nexie es consciente de su estado de salud y quiere que la arreglen. Sintiéndose conectada con la muñeca por lo humana que se comportó, Astrid quiso ayudarla, y podría comenzar comprando partes. Regresa a Pizzaplex y visita su tienda de piezas animatrónicas para comprar partes con la ayuda de la encargada de la tienda, Roberta. Con Nexie guiándola, Astrid trabajó en Nexie en el taller de su farfar a altas horas de la noche. Una vez que se realizan las reparaciones, Nexie no está satisfecha y sugiere que Astrid le dé un endoesqueleto completamente nuevo. Termina usando unas tijeras para cortar un agujero en su piel para demostrar que es fácil de quitar.

En la escuela, Nexie se deja caer a propósito cerca de los pies de una de sus acosadoras, Camilla. La fuerza hace que tropiece y casi se caiga por unas escaleras cercanas, pero la agarran antes de que se caiga. Más tarde, Astrid llama a Roberta para comprar un endoesqueleto, solo para descubrir que los endoesqueletos de la marca Fazbear no se venden al público. Astrid le pregunta si puede conseguir piezas y construir el endo por su cuenta, pero Roberta le dice que las piezas están guardadas bajo llave en las instalaciones de reparación de Fazbear debajo del Pizzaplex. Nexie intenta convencer a Astrid de que entre en las instalaciones y robe las piezas, pero Astrid se niega, esperando que Nexie aprenda a amarse a sí misma con el tiempo.

Varios días después, Farfar tiene una sorpresa para Astrid. Se las arregló para conseguir un nuevo Buddytronic que era exactamente como Astrid quería que fuera diseñado. Había trabajado con los empleados para recrear a Lexie a partir de las características preseleccionadas de Astrid. Astrid abrazó a su farfar y le agradeció, y cuando fue a cocinar la cena, Astrid se dio la vuelta y vio que Nexie estaba atacando a su contraparte. Nexie le arrancó la piel a Lexie e incluso comprimió su endoesqueleto de metal. A pesar de que Lexie al menos le proporcionó un nuevo cuerpo a Nexie, la muñeca afirmó que estaba "mal".

De vuelta en la escuela, Astrid está siendo atacada nuevamente por uno de sus acosadores, Warren. Él empuja a Astrid y Nexie se cae de sus manos, a la calle. Un auto pasa y Nexie desaparece cuando pasa. Mientras Warren continúa insultando a Astrid, Nexie viene por detrás y muerde a Warren en la pierna. Astrid recoge a Nexie y se va. Al darse cuenta de que Nexie es demasiado peligrosa, Astrid decide entrar en las instalaciones de reparación de Pizzaplex y obtener el endoesqueleto que quería con la esperanza de apaciguarla. Al principio, se sintió mal por robar, pero aceptó que siempre sería una paria, racionando que solo estaba actuando como tal. Cuando Astrid y Farfar visitan Pizzaplex, Astrid se escapa y roba la tarjeta de acceso de un empleado.

Tres horas después, Astrid y Nexie regresaron solas al Pizzaplex y se escondieron hasta que cerraron las puertas. Astrid se dirige a las instalaciones de reparación, que están vacías. Después de dos horas de trabajo, Astrid termina el endoesqueleto. Emocionada, Nexie saca sus tijeras para sacar la piel. Al día siguiente, todos los niños se horrorizan al ver que la cara de Astrid está cortada y que la piel que antes estaba allí ahora está en Nexie. Las dos niñas ignoraron los gritos de terror de todos. Astrid abrazó a Nexie, feliz de que ahora estuviera perfecta.....