La noche del evento sigue resonando en la mente de todos los presentes, especialmente en las familias de Alexander y Edward. Las palabras y acciones de la velada anterior no han sido olvidadas.
-Palacio de Valoria, Salón del Trono-
El rey Julian se enfrenta a Alexander con seriedad.
"¡Alexander, lo que sucedió anoche fue inaceptable! ¿¡Cómo puedes golpear a tu propio hermano en una gala de esta importancia!?"
"Padre, no podía tolerar que me insultara de esa manera, ni que faltara al respeto a Edward," responde Alexander.
La reina Isabel interviene con una mirada preocupada. "Entendemos tu enojo, hijo, pero debes aprender a controlar tus emociones. Nuestro reino no puede permitirse tales demostraciones de violencia."
"Lo siento, madre. Haré lo posible por mantener la calma en el futuro," dice Alexander con sinceridad.
Lucas entra al salón, con una ligera marca en su rostro.
"¿No vas a decirle nada más, padre? Alexander me golpeó frente a todos," se queja Lucas.
El rey Julian frunce el ceño. "Lucas tiene razón. No solo fue una falta de respeto a la familia, sino también una muestra de debilidad ante nuestros aliados."
Alexander, frustrado, responde: "¿Muestra de debilidad? ¿No consideras débil insultar y provocar a los demás?"
Lucas se cruza de brazos. "Solo decía la verdad, Alexander. Quizás deberías enfrentar quién eres realmente."
La reina Isabel toma la palabra. "Alexander, basta. Lucas, vamos a revisar esa herida."
Alexander mira a Lucas con desdén. "Lucas, esto no se trata de verdades o mentiras, sino de respeto. Algo que claramente no entiendes."
-Jardines del Palacio de Baldoria-
Edward camina solo por los jardines, inmerso en sus pensamientos.
"¿Qué espero de todo esto? La política y las expectativas... todo parece tan vacío," murmura para sí mismo.
De repente, aparece Alexander por casualidad, paseando por el mismo sendero.
"Edward, no esperaba verte aquí," dice Alexander con una mezcla de sorpresa y alivio.
"Yo tampoco, pero parece que el destino tiene otros planes," responde Edward con un tono reservado.
"Quiero disculparme nuevamente por lo que pasó. No debería haber dejado que las cosas llegaran tan lejos," dice Alexander con sinceridad.
Edward asiente. "Acepto tu disculpa, pero eso no cambia las circunstancias. Hay demasiadas expectativas y presiones en nosotros."
"Quizás, pero podemos encontrar maneras de manejarlas. No tenemos que estar siempre en conflicto," sugiere Alexander.
Edward levanta una ceja. "Supongo que tienes razón. Pero las cosas no cambian de la noche a la mañana. Mi padre tampoco quiere que me acerque a ti."
"¿Qué quieres decir con eso?" pregunta Alexander, intrigado.
"Dice que no necesitamos que los Valoria manchen nuestro apellido. No cree que debamos tener una relación cercana," explica Edward.
"Eso es ridículo. No somos nuestros padres, podemos decidir por nosotros mismos," replica Alexander con determinación.
**Pasillo del Palacio de Valoria-
Lucas, todavía con una ligera marca en su rostro por el golpe, se encuentra con Alexander en uno de los pasillos.
"Hermano, supongo que estás satisfecho con lo que lograste anoche," dice Lucas con resentimiento.
"Lucas, no vine a discutir. Solo quiero que entiendas lo inapropiado que fue tu comportamiento," responde Alexander con tono cansado.
"¿Inapropiado? ¿Decir la verdad es inapropiado ahora?" pregunta Lucas con ironía.
"Insultar y provocar no es decir la verdad. Deberíamos intentar trabajar juntos, no enfrentarnos," dice Alexander con firmeza.
"No necesito tus lecciones, Alexander. Si quieres que las cosas mejoren, empieza por cambiar tú," insiste Lucas.
"Lucas, no se trata de mí. Se trata de nosotros, de la familia," dice Alexander, tratando de mantener la calma.
"La familia que siempre te defiende, ¿verdad? Yo siempre soy el problema," responde Lucas con amargura.
"No es así, Lucas. Todos cometemos errores," asegura Alexander.
"Claro, sigue justificándote. Al final, soy solo el segundo hijo problemático," dice Lucas con desprecio.
"No estoy justificándome. Estoy tratando de hacer las cosas bien," afirma Alexander.
"Bueno, sigue tratando. No me sorprende que siempre estés en problemas," concluye Lucas.
Enfurecido por las provocaciones, Alexander golpea a Lucas en la cara. Lucas cae al suelo, sorprendido y enfadado.
"¡Te lo dije! Eres un... ¡un idiota!" exclama Lucas mientras se reincorpora.
-Jardines del Palacio de Valoria-
Alexander y Edward se encuentran nuevamente en el jardín por casualidad.
"Edward, sé que las cosas no han sido fáciles, pero quiero intentarlo de nuevo. Sin conflictos, solo una conversación honesta," dice Alexander con esperanza.
"De acuerdo. Podemos empezar por ahí. Tal vez haya más en juego de lo que pensamos," responde Edward, mostrando apertura.
"Sí, y quizás juntos podamos encontrar una manera de manejarlo todo," sugiere Alexander.
"Pero mi padre no quiere que me acerque a ti. Dice que mancharías nuestro apellido," dice Edward con preocupación.
"No somos nuestros padres, Edward. Podemos decidir por nosotros mismos," afirma Alexander con determinación.
"Lo sé, pero cambiar su mentalidad no será fácil," reconoce Edward.
"Nadie dijo que lo sería. Pero vale la pena intentarlo," concluye Alexander.
Los dos príncipes se miran a los ojos, con una nueva comprensión formándose entre ellos. La madre de Alexander, desde el palacio, los llama.
"¡Alexander, es hora de volver!" llama la madre de Alexander.
"Debo irme. Pero continuaremos esta conversación," dice Alexander, mirando a Edward con una mezcla de tristeza y esperanza.
"Lo espero," responde Edward.
Alexander se despide de Edward, sintiendo que, a pesar de los obstáculos, un camino hacia una mejor relación puede estar comenzando a abrirse.
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Continuará...
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Amor Prohibido en el Trono
RomanceEn el espléndido reino de Valoria, donde el amor entre personas del mismo sexo es un secreto peligroso, Príncipe Alexander y Príncipe Edward, de reinos enemigos, se encuentran en una gala real... ¿Qué misterios se ocultan tras esta inesperada reunió...