Blood Circus (Hannigram)

Prólogo

-¡Sean todos bienvenidos!

-¡Al mejor circo del mundo!

-¡Lleno de shows interesantes y tenebrosos!

Hablaba un presentador con su voz ronca.
Las luces que estaban apagadas de inmediato se encendieron al escuchar la voz, una luz de forma circular que solo se enfoco en el dueño de la voz, este tenía la cara pintada de payaso, tenia lineas rojas por debajo de sus ojos y una nariz de payaso muy roja. Llevaba traje color vino con una corbata a juego. También llevaba un sombrero de color negro con una tirita roja a su al rededor.

-¡Todos ustedes podrán decidir su show el día de hoy! ¿Cómo lo quieren?
¿Limpio o sucio?

Se escuchaban gritos y murmullos de la gente, pues lo querían sucio.

-Pero por favor, los que van llegando tomen asiento rápidamente, el show está por comenzar. ¡Aún hay suficiente espacio!

La gente ya había escuchado del circo en la ciudad, pues les parecía muy interesante y muchos decían que este circo era muy aterrador y algo raro. Pues aquel que se animaba a entrar salía completamente diferente, como si hubiera tenido alguna charla con el mismiso diablo.

A medida que pasaban los minutos la gente iba entrando a la carpa gigante de color rojo con blanco, la entrada estaba sumamente oscura y el lugar olía a humedad, algo desagradable.
Will y su amiga habían ido de pura curiosidad, por qué todos en la universidad no dejaban de hablar de este. Pero a Will no le gustaban esas cosas, incluso uno de sus compañeros fue a ese circo, jamás volvió a clases.

El circo se llenó rápidamente y se cerró la carpa, quedando en total oscuridad solo enfocando una luz al presentador.

-Parece que hoy tenemos muchos invitados, que tal si empezamos por mocharle un pie a ese pequeño de lentes y rizos muy alborotados, que está sentado en la última fila de la grada frente a mi. Sería interesante, ¿No?

Hannibal desde que entró Will ya le había hechado una que otra miradita a este, pues le llamo la atención, quizás el sería la pieza perfecta para tener el mejor show.

Will rápidamente supo que era él, pues tenía la mirada del presentador clavada en el, se asusto y negó muchas veces con la cabeza.

-Solo bromeaba, tu estás aquí para observar mi show, no para ser voluntario.

-¡Tráiganme a Chilton! el será el verdadero chico estrella está noche.

Hannibal le dió una última mirada más a Will y procedió a dar su gran show. Will solo dió un suspiro de alivio, pues fue algo sumamente inesperado.

El show procedió en cortar cada uno de las extremidades del voluntario obligadamente seleccionado. Primero cortaron sus piernas, siguieron con sus brazos y por último la cabeza que está fue arrojada al aire, pensaban jugar ¿Voleibol? Así fue, pasaban los minutos, horas, y la cabeza volaba por los aires como si fuera una pelota, Hannibal dió un remate al suelo y la cabeza se desfiguró totalmente.

Los aplausos y gritos se escuchaban por todo el circo, unos aplaudían y otros se quedaban viendo con horror. Will se quedó paralizado ante tal show. Que mierda estaba viendo.

Se levantó de su asiento y busco rápidamente la salida pues una voz lo detuvo.

-¿Te vas? Es muy temprano, ni siquiera he anunciado el final. Lo he preparado para ti, ¡Para ustedes!

El presentador decía mientras Will solo asentía volviendo a su lugar, pues temia que si se negaba a ver el show sería asesinado inmediatamente. El show dió por terminado dándole de comer a un lobo los desechos del humano asesinado.
Hannibal vió a Will con una sonrisa y hablo.

-Y doy por terminado este espectáculo de la noche, por favor sean bienvenidos cuando gusten. ¡Están en su hogar!

-Y Will, para la siguiente tu serás mi pequeño voluntario en mi show, te espero pronto.

¿Cómo sabía su nombre? ¿Que demonios había pasado? ¿Quien era ese sujeto? Will tenía tantas preguntas que se quedó mirando un punto fijo hasta que las palabras de su amiga lo sacaron de sus pensamientos.

-Will, salgamos de este horrible lugar, el encargado del circo no te ha dejado de mirar. Esto es una mierda de circo ¡Vámonos!

Terminaron saliendo del circo, pues prácticamente habían tenido una función con el diablo, ese lugar era un maldito infierno y la gente estaba encantada de visitar más a menudo ese lugar.
¿Qué estaba pasando?

Hannibal tuvo al mejor invitado ese día.