Criar a mi prometido con dinero

Capítulo 86

Karhan levantó el espejo y se miró la cara. El hinchazón había bajado mucho, así que pensó que estaría bien salir. Hace unos días, la marca roja todavía estaba allí, así que estaba preocupado. Era porque la impresión feroz, como una herida de una pelea, parecía aún más horrible.

Karhan abrió lentamente el armario, sacó su ropa y se la puso. Quería descansar más hoy, pero no podía faltar más a clase.

Se le escapó un suspiro melancólico, fue porque le vino a la mente lo que había sucedido hacía un rato.

Esa noche permaneció especialmente clara en su mente. Karhan era plenamente consciente de las emociones que había estado albergando hasta ahora. El hecho de que había sido consciente de Lilia durante mucho tiempo, y que el nombre que ella le había dado le pareciera especial... Se dio cuenta de que todo era porque amaba a Lilia.

Karhan vagaba como un barco flotando en el océano. Era consciente de sus sentimientos, pero no sabía qué hacer después de eso.

Karhan se conocía objetivamente bien. Ni siquiera estaba calificado para estar al lado de Lilia porque solo estaba recibiendo su ayuda. Era demasiado codicioso pedirle que lo quisiera como él quería.

Además, pensó que ella se sentiría agobiada si supiera lo que él sentía. ¿Cómo podría sentirse cómoda cuando su lado tenía sentimientos completamente diferentes?

Lo que más temía era que esta relación cambiara y que, con toda seguridad, no pudiera volver a ser como antes.

Karhan quería que su corazón muriera. Quería que todo desapareciera cuando cerrara los ojos y los abriera. Sin embargo, incluso después de que pasara un día y luego una semana, en lugar de desaparecer, lo invadió el anhelo de verla.

“…….”

Tak, la puerta del armario se cerró débilmente. Después de prepararse para salir, Karhan salió silenciosamente del dormitorio y subió al carruaje. Inclinando la cabeza junto a la ventana, Karhan se presionó los ojos con la mano.

Todo tipo de pensamientos lo molestaban cuando estaba en un espacio tranquilo. Por eso no podía dormir bien, por lo que se sentía pesado como si hubiera un peso sobre sus párpados.

¿Qué debería decir? Si me encontrara con Lilia hoy, no sabría cómo reaccionar ante ella. Entonces, lo que Rebecca dijo de repente pasó por su mente.

—¿Crees que te amará con todo su corazón?

Frustrado y angustiado, Karhan cerró los ojos con fuerza. Cuando por fin los abrió, el carruaje atravesaba el jardín de la familia Bloden.

Como si el verano estuviera a punto de llegar, el jardín estaba teñido de un verde espeso por todos lados. Ya lo había visitado decenas de veces, pero no lograba acostumbrarse al enorme tamaño del jardín. El carruaje siguió andando durante un buen rato y llegó a la entrada del anexo. Karhan, que se bajó del carruaje, miró a su alrededor con ligereza.

"Aquí estás."

Pero fue solo el empleado quien lo recibió. Karhan se encogió de hombros involuntariamente. Era lamentable, pero por otro lado, se sentía afortunado de no encontrarse con Lilia. Si se hubiera encontrado con Lilia en ese momento, se habría quedado paralizado sin decir nada.

Karhan dejó su bolsa en el aula y se dirigió a la arena de entrenamiento. Los caballeros de la familia Bloden estaban en medio de un entrenamiento en la arena. Karhan, que eligió una espada de entrenamiento, intentó unirse. Entonces alguien lo llamó.

"Caballero."

Violet, vestida con ropas claras, estaba allí de pie. Cuando Karhan se inclinó cortésmente, Violet sonrió.