¡𝗴𝗼𝗹𝗱𝗲𝗻 𝗵𝗼𝘂𝗿! ~ OT2023 fanfiction
𝗩𝗜𝗢𝗟𝗘𝗧𝗔 𝗛𝗢𝗗𝗔𝗥 𝗫 𝗙𝗘𝗠!𝗢𝗖 ⬎
una chica con un corazón roto, otra chica arrepentida
¿que podría salir mal si ambas se reencuentran?
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ALANNA DESPERTÓ ASUSTADA, JADEANDO y con el corazón latiendo de manera acelerada. una vez más, la misma pesadilla se había apoderado de su descanso, recordándole sus miedos y ansiedades más profundos. las imágenes de la pesadilla seguían frescas en su mente: aquella chica tomándola de la cadera con firmeza, obligándola a quedarse callada, tocándola inapropiadamente mientras la oscuridad se cernía sobre todo lo demás.
la habitación estaba oscura y silenciosa, excepto por la respiración tranquila de ruslana, quien dormía plácidamente en la cama junto a la suya. sabiendo que no podría dormir más aquella noche, la rubia se deslizó fuera del calor que las sábanas le brindaban, procurando no despertar a su amiga.
con pasos suaves y descalzos que apenas hacían ruido sobre el piso de madera, alanna se dirigió a la acogedora sala del apartamento de juanjo y martin. encendió una pequeña lámpara en una mesa auxiliar, la cual emitió un cálido resplandor que apenas iluminaba la estancia. tomó su libreta de composiciones junto con un lápiz, sentándose en el sofá de terciopelo azul oscuro. comenzó a pasar las páginas con cuidado, sus dedos temblando ligeramente hasta que se detuvieron en una canción en específico, una de las tantas letras que había escrito para violeta hace unos meses. alanna no pudo evitar sentirse impotente e ingenua.
los recuerdos de su tiempo en operación triunfo invadieron su mente. ¿cómo pudo haber creído que violeta realmente la querría? ¿cómo pudo pensar que ella dejaría a su novia para estar con ella? alanna solo había sido un juego para violeta dentro de la academia, y aquello dolía profundamente. las lágrimas comenzaron a deslizarse por sus mejillas, cayendo sobre la hoja con aquella dulce canción escrita. la tinta se corría ligeramente bajo la humedad de sus lágrimas, difuminando algunas palabras pero haciendo que cada línea escrita se sintiera aún más dolorosa y real.
las horas pasaron y el amanecer ya había salido hacía casi una hora. alanna se sentía aún más frustrada al no poder formular una oración que la convenciera para escribirla en una de sus canciones. llevaba más de un mes con un fuerte bloqueo creativo, y aquello era realmente malo para ella, pues la composición se había vuelto su manera de desahogarse. ahora, sin poder hacerlo, solo retenía las cosas que le generaban malestar.
mientras contemplaba la ciudad desde el ventanal, el sol comenzaba a iluminar los edificios, las calles todavía medio vacías y el cielo teñido de un suave rosa anaranjado. fue entonces cuando martin apareció en la sala, frotándose los ojos con una expresión de sorpresa al verla.
—¿lanna? —preguntó con una mezcla de curiosidad y preocupación, su voz aún ronca por el sueño— ¿qué haces levantada tan temprano?
la rubia negó con la cabeza suavemente, no queriendo hacer que sus problemas fueran una carga para sus amigos también. martin, percibiendo su estado de ánimo, se sentó junto a ella en el sofá, su cercanía era reconfortante.
