Aún con las sensaciones de su reciente orgasmo en su cuerpo, Yoongi dejó de pensar en eso en tanto bajaba a atender a la repartidora, y también se decidió a reportar el inconveniente con el administrador del edificio acerca de la cerradura de la entrada.
—Bajar siete pisos solo para recoger mi jodido almuerzo y todavía cobran una exageración de arriendo en este jodido edificio, ¿qué hacen con los jodidos ingresos? Deberían dar el jodido mantenimiento correspondiente, bola de... —maldecía para sí mismo mientras el ascensor llegaba a la planta baja.
Con la tarjeta llave abrió la cerradura y enseguida se encontró con la chica a un lado de la motocicleta y cargando con una bandeja con seis vasos, además de una bolsa de papel.
Frunció las cejas porque pensó que quizás se había confundido con su pedido al estar tan atento a la página de J-hope.
—Oh, hola, señor... —saludó la chica revisando la factura del pedido—, ¿Jeon?
—¿Qué? —llegó hasta ella y vio más de cerca el pedido—. No no, yo soy el señor Min, no Jeon.
—¿Ah, no? —con el casco sobrepuesto en la cabeza, la chica echó otro vistazo a la factura—. Pero si así dice aquí, piso seis departamento J13...
Con las cejas juntas y manteniendo la boca abierta ligeramente, Yoongi expresaba en su gesto la molestia por el error que había interrumpido su grato momento de privacidad.
—Llamaste a mi timbre, mi timbre A17 piso siete, mi timbre dónde claramente está el número de mi departamento.
Subiendo y bajando las cejas, la chica silbó de alto a bajo mientras veía la botonera.
—Uy... ¿usted ha visto todos esos botones de los doce pisos y los cuarenta y cinco departamentos? Soy humana, lo lamento...
Rodando los ojos, él negó para sí mismo, solo quería volver arriba y esperar su comida, pero entonces escuchó un par de voces saliendo del edificio.
Volteó y enseguida vio a un par de chicos que vagamente se le hicieron muy familiares: uno de ellos vistiendo una camiseta sin mangas, presumiendo de sus bíceps trabajados y su piel como un lienzo lleno de tatuajes, con lentes de sol y una gorra hacia atrás. Y el otro chico que, aunque también tenía lentes de sol puestos, su cara era inconfundible para Yoongi. Esa nariz perfecta y los labios encorazonados que jamás había visto en nadie más, los movimientos delicados y elegantes naturales y su risa muy conocida, lo hicieron entrar en un fugaz trance.
Como si sus pies se hubiesen enterrado en el concreto, no pudo moverse. Su boca no podía articular palabra, su mirada se abrió en asombro por lo que estaba viendo acercarse, mientras que su corazón se aceleraba peligrosamente.
Realmente no podía asimilarlo, no podía creer que J-hope estuviese ahí, saliendo del mismo edificio donde él vivía.
Porque estaba sumamente seguro de que era él.
ESTÁS LEYENDO
Like a virgin -YoonSeok-
FanficLuego de un tiempo de ser el fan número uno de un creador de contenido para adultos, Yoongi se siente lo suficientemente enamorado de esa persona desconocida, se vuelve fiel y leal a todo el contenido compartido de J-hope, su ídolo sexual. Hasta que...