LOVE RIVALS | RICHARD RÍOS

005: UNDER THREAT

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Capítulo 5:
Bajo Amenaza

La Copa América continuaba y el equipo colombiano avanzaba con fuerza, pero la sombra de la organización corrupta seguía pesando sobre ellos. Annie se encontraba en un dilema constante: mantener su enfoque en la cobertura del torneo o seguir investigando la oscura trama que rodeaba a Richard y al equipo.

Una tarde, después de un entrenamiento, Richard la invitó a dar un paseo por la ciudad. Quería un respiro del estrés constante y un momento de normalidad. Caminaban por las calles empedradas, disfrutando de la brisa fresca y las risas de los niños jugando en los parques.

──Gracias por acompañarme, Annie. Necesitaba esto──, dijo Richard, mirando el horizonte.

──Yo también. Es bueno tomar un descanso de todo el caos──, respondió ella, sintiendo un alivio temporal.

──Annie, he estado pensando en todo lo que está pasando. Sé que no es fácil para ti, y quiero que sepas que aprecio tu valentía y determinación──, dijo Richard, deteniéndose y mirándola a los ojos.

──Richard, estamos en esto juntos. No voy a dejar que nos derroten. Hay demasiadas vidas y carreras en juego──, respondió Annie con firmeza.

A medida que avanzaban, Annie notó a un hombre que parecía estar siguiéndolos. Trató de ignorarlo al principio, pero su persistencia la inquietó. Decidieron entrar a una cafetería para despistar al hombre y tener una conversación más privada.

──Richard, creo que nos están siguiendo──, susurró Annie mientras se sentaban en una mesa al fondo.

──Lo sé. Lo he notado desde hace un par de días. Están vigilándonos──, respondió Richard, manteniendo la calma.

──¿Qué hacemos?──, preguntó Annie, sintiendo la adrenalina correr por sus venas.

──Necesitamos pruebas. Algo que podamos usar para exponerlos y protegernos. Y creo que sé cómo conseguirlo──, dijo Richard con determinación.

Los días siguientes, Richard y Annie comenzaron a planear cómo reunir pruebas sobre la organización. Richard decidió usar su estatus dentro del equipo para acercarse a los miembros de la organización y obtener información crucial.

Mientras tanto, Annie continuó con su trabajo, cubriendo los partidos y entrevistando a los jugadores. Sin embargo, la presencia de la organización se hacía cada vez más evidente, y la tensión dentro del equipo aumentaba.

Una noche, después de un partido especialmente difícil, Annie recibió una llamada inesperada. Era uno de los jugadores del equipo, Davinson Sánchez, pidiéndole que se reuniera con él en un lugar apartado. Annie, intrigada y preocupada, aceptó la invitación.

Cuando llegó al lugar, Davinson la recibió con una expresión seria. ──Annie, tenemos que hablar. Sé lo que estás investigando y quiero ayudarte. He visto cosas que no puedo ignorar, y creo que juntos podemos detenerlos.

──Gracias, Davinson. Cualquier información que tengas es crucial. Esto es más grande de lo que imaginé──, respondió Annie, agradecida por su apoyo.

Davinson comenzó a contarle sobre las actividades de la organización, sus métodos de coerción y los sobornos a jugadores y directivos. Le entregó documentos y grabaciones que había conseguido en secreto, pruebas que podrían cambiar el curso de su investigación.

Esa noche, Annie regresó a su hotel con una mezcla de esperanza y temor. Sabía que ahora tenía pruebas concretas, pero también comprendía que estaba en peligro más que nunca.