Teenagers in love - ʳᵒᵈʳᶦᵛᵃⁿ -

06

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Rodrigo observaba desde un rincón, con una expresión de frustración.

Rodrigo esperó a que Iván estuviera distraído. Tomó una pelota de voleibol y la lanzó con fuerza hacia Iván. La pelota impactó a Iván en el costado, haciéndolo tambalear.

Iván se giró furioso. —¡¿Qué te pasa, enano?! ¿Por qué me tirás eso?— gritó, con la cara enrojecida de enojo.

Rodrigo avanzó hacia él, sin mostrar miedo. —¿No te gusta, jirafa? Así es como se siente cuando alguien te tira una pelota y finja que no te vio.—

Iván frunció el ceño y dio un paso amenazante hacia Rodrigo. —Sos un maleducado, pibe. Solo estás buscando problemas o que? —

Rodrigo lo miró con desdén. —Y vos sos un grandulón que siempre anda jodiendo. ¿Por qué no aprendés a pedir disculpas?—

La pelea verbal entre ellos se intensificó con insultos y apodos. — No tenés clase pedazo de mierda enano—dijo Iván.

Rodrigo replicó con firmeza. —Y vos sos una jirafa agrandado que se cree superior andate a cagar pedazo de mierda encima adicto al porno como los demas —

Uno de los amigos de Iván, pedro, notó la creciente tensión y se acercó rápidamente. —¡Che, basta ya! Esto no va a llevar a nada bueno.—

Iván y Rodrigo se miraron con resentimiento, pero no dejaron de tirarse cosas. Iván lanzó una pelota de básquet hacia Rodrigo, quien la esquivó y le tiró de vuelta una botella de agua vacía.

—¡Pará, pelotudo! No te hagás el boludo,— gritó Rodrigo.

—¡Enano, aprendé a comportarte!— replicó Iván.

Pedro, cada vez más preocupado, se interpuso entre ellos. —¡Basta, loco! En serio, esto se está yendo de las manos. Relájense.—

A pesar de la intervención de Diego, ambos seguían lanzándose insultos y objetos. El patio se convirtió en un campo de batalla improvisado, con los demás estudiantes observando la escena con asombro y diversión.

Finalmente, Pedro logró agarrar a Iván por los hombros y empujarlo hacia atrás. —Iván, basta. Ya fue, loco. Vamos a otro lado.—

Rodrigo, respirando agitadamente, se quedó donde estaba, aún molesto pero satisfecho de haberle devuelto el golpe a Iván. La tensión en el patio empezó a disiparse, aunque ambos sabían que esto no había terminado.