EXTRAÑAMENTE HERMOSO

5 4 0
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Habían dado las siete de la noche todo estaba listo me andaba arreglando poco a poco me le quede viendo al vestido blanco, y a un vestido negro que tenía, sabia que este regalo debía ponermelo ya que Gerardo había gastado en el, además era lindo, me lo termine poniendo y al verme al espejo me veía un poco mas exquisita no sabia como describir pero el reflejo reveló una segunda figura la misma que me atormenta noche con noche pero esta vez me dijo algo lindo era joven lleno de vida no como en mis pesadillas recurrentes —que linda te ves el día e hoy, eres todo aquello que amo, y al fin te encontré—

Habían dado las siete de la noche todo estaba listo me andaba arreglando poco a poco me le quede viendo al vestido blanco, y a un vestido negro que tenía, sabia que este regalo debía ponermelo ya que Gerardo había gastado en el, además era lindo, ...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al  ver atrás de mi, no había nadie, pero algo me decía que realmente era el mismo hombre de mis sueños ¿Caso era una ilusión? O ¿Solo era parte de mi pasado? Mientras tomaba el anillo con el collar, me dispuse a terminar de pintarme los labios delinear me los ojos y no me ponía sombras la verdad no me sabia pintar casi pero trate el día de hoy ver uno que otro tutorial para verme un poco mas presentable vi la hora y ya faltaba menos de diez minutos para que llegara Gerardo en ese momento tome mi bolsa , mis llaves y espere cuando sonó el claxon de se coche salí de mi hogar y lo vi afuera de su coche con un ramo de girasoles con un pantalón blanco y camisa negra se veía tan increíblemente lindo —su carruaje princesa, está listo—  me reí solo para subirme y tomar el ramo me encantaban los girasoles eran mi delirio arranco el auto sin un rumbo fijo hasta que llegamos a un pequeño sitio algo alejado era un campo donde tenía el algo que decirme —Layla, no solo me gustaría que fueras mi novia me gustaría que fueras más que eso, y si no quieres responder ahora, te dejare la pregunta abierta— se arrodilló al atardecer de ese día y me dijo —Layla Rose quisiera que tengas este anillo de promesa, que un día cambiaré por el de compromiso y después te haré mi bella esposa— tome el anillo, y me lo puse no quise responder no por gusto si no por que no tenia las palabras exactas me puse el anillo en acción de aceptación el me tomo en brazos, me beso y se dio la noche más bella no sabia que esto traería problemas tiempo después.

 

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Esa misma noche Gerardo quiso quedarse en mi hogar —espero no te moleste mi amor pero me gustaría quedarme el día de hoy contigo— lo mire fijamente y dije en un tono sarcástico —¿Enserio? ¿Quieres quedarte en mi casa donde posiblemente tenga brujería hecha o vudú? Solo para que te fijara me mi hagas si mi vida claro quédate conmigo hoy— empezó a reír frenéticamente y dijo —cisne negro, tu no podrías hacer eso, por que yo siempre estuve embrujado desde el día uno que vi tus brillantes ojos— mire su sonrisa y me derretía por el, antes de llegar a mi hogar pasamos por la cena, compramos bonlees y llevamos algunas bebidas, la noche se veía realmente hermosa, el se veía tan guapo que no sabia como explicar, pero mi mente me jugo una mala pasada —“¿Quieres casarte conmigo?— una voz algo escalofriante me decía esto a lo lejos, cuando salió Gerardo su rostro se transformó en ese hombre ahora mis pesadillas se volvían realidad—¿Estas bien? ¿Quieres alguna pastilla o algo cariño?— negué con la cabeza y me volví a subir al auto veía la ciudad, pasar en el vidrio pero sentía que esto ya lo había vivido anteriormente en eso pasamos por una casa que estaba abandonada no se de donde conocía esa casa, se veía en ruinas como si hubiera, ahí recuerdos, llegamos a mi hogar donde ahora habría un poco de vida en esa fría celda llamada hogar —Bienvenido a mi humilde morada mi lord— dije riendo un poco el se rió y dijo con un tono burlón —es hermosa por qué usted vive aquí dulce princesa además este hogar será lindo cuando estemos—  en ese momento me tomo en brazos y nos dispusimos a cenar, mientras oíamos las gotas de lluvia caer en la calle, los truenos y relámpagos empezaron a hacer más salvajes, cuando se fue la luz nos tomo por sorpresa el ambiente era agradable no hacía calor no frío, el se fijo afuera de la ventana, y con un tono algo serio dijo —fue en toda localidad, es mejor prender unas velas, y medio abrir unas ventanas para poder hacer correr el aire— empecé a abrir ventanas y sentimos el aire de la misma lluvia, sentía tan delicioso el clima, tomamos vino y demás mientras reíamos, no nos dimos cuenta que estábamos ya en la habitación ¿Cómo ocurrió esto? No tengo idea solo recuerdo que estábamos jugando a que no podria cargarme ¡Vaya error! Quedamos viendo fijamente sabíamos Lo que ambos queríamos no dudamos ni un minuto para tener una noche de pasión, sus besos sabían a miel, sus caricias parecían bellos toques finos a un arpa, ¡Oh dios! Este hombre sabia satisfacerme de mil maneras, su miembro o entrar en mi se sentía excitante cuando se terminó el acto nos quedamos abrazados uno al otro esta vez esperaba que mi sueño ni fuera pesadilla.

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


 

Esta vez no hubo tal sueño solo uno muy tranquilo, donde veía una habitación y al hombre de cabellera cobriza, me besaba con ternura pero en sus dedos veía un anillo similar al mio sonreía el hombre —Te amare toda la vida te encontré y jamás te dejare— en ese momento que me beso, recordé poco a poco lo que ocurrió, un accidente recuerdo que habían chocado contra mi recuerdo que todavía pude levantar la mirada vi el parabrisas roto enfrente mio, vi mis manos ensangrentadas en el volante vi una carretera y veía a ese hombre gritaba mi nombre —¡Layla! ¡Layla! ¡Por favor reacciona sal de ahí!— cuando volteaba vi como venía otro carro hacia mi, no sabia que hacer, en ese momento grite tan fuerte que desperté del sueño —¡NOOOOOOO!— desperté a Gerardo el estaba asustado que me abrazo y ijo —tranquila, fue una  cálmate mi vida santo dios ¿que fue ahora?— llorando solo pude soltar unas cuantas palabras —y-yo yo tuve un accidente hace tres años atrás, pero no recuerdo mucho no se que paso— se me quedo viendo con ternura me beso de nuevo y volvimos a dormir cuando vi el reloj eran las tres de la mañana tenia miedo ya había vuelto la luz el clima se prendió, Gerardo estaba a mi lado no sabia que era lo que el destino nos quería decir pero estaba segura que el era el hombre que amaba durante la mañana el decidió irse a trabajar con su hermoso pantalón blanco y la camisa negra se veía realmente Bello, pero sabia que teníamos que separarnos para que no le dijeran nada  cuando el se retiro, decidí buscar respuestas de lo que estaba pasando por mi mente fui a buscar la única persona que sabia un poco pasaba y que me acogió cuando desperté de ese terrible incidenre cuando llegue a ese lugar tan bello, con un jardiin grande la casa era demasiado grande cuando toque la puerta blanca dije —hola podemos ¿Hablar?— me miro fijamente y sonrió —claro Layla pasa no te esperaba pero me da gusto verte William no esta pero asa anda y de paso nos  ponemos al dia— era mi amiga Neidy ella debía  saber lo que estaba pasando








Pureza Tomo 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora