3

453 50 3
                                    

Naruto mira el sujeto frente a él, había tomado la decisión de hacerlo pasar, a pesar de que por alguna razón tiene un poco de miedo.

─Bueno, mi casa es pequeña espero que eso no te moleste, más te ayudaré a buscar los materiales para que puedas construir tu hogar, será uno de mis clones.

-Porque no lo haces tú mismo.

La piel de Naruto se eriza, no previó que el sujeto se había movido tan rápido, se voltea, mira en grande.

-Por Dios Itachi, no me asuste así por favor —el rubio solo mira con el mayor sonríe, un escalofrío pasa por su cuerpo, se aclara la voz —No puedo hacer desarreglos, así que uno de mis clones te ayudará.

—No hay necesidad de salir de la isla —informa el mayor tomando asiento en uno de los mueble bonito de su rubio —tengo todo aquí, aunque —sus ojos negro no pasan de vista esos hermoso ojos azules, aunque está un poco opacos.

—¿Aunque?

El mayor sonríe —Aunque, si me dejara vivir aquí contigo no estaría mal la idea.

—Mi casa —el rubio mira alrededor, solo tiene dos habitaciones, la suya y una que sería para su bebe, pero analizándolo bien, sería bueno que alguien estuviera con él en estos momento, ya que puede pasar cualquier cosa, más adelante cuando su hijo nazca podrá hacerle una habitación.

—Está bien, puedes vivir aquí, más adelante te explicaré algo, por ahora quiero descansar, en la despensa hay comida, puedes tomar lo que guste.

El mayor observa como el rubio entra a una habitación, a los poco minutos agudizar su oído y se dio cuenta que ya se durmió, se sorprendió un poco, tal vez el pequeño rubio está muy cansado.

Se levanta del mueble y mira todo a su alrededor, a los segundos aparece un hombre con la misma estatura de él, casi mismo cuerpo, pero rasgo y cabello diferente.

—Kurama-sama.

—Tu.

—Gracias por ayudarme.

Kurama resopla —Es mi cachorro, se que lo has cuidado desde la sombras, además yo tengo culpa en confesar su condición —ambos se miran — tarde o temprano hay que confiesa lo que hemos hecho.

—No creo —expresó Itachi —esto será una mentira piadosa, podemos decir que había dejado mi muestra hace mucho tiempo.

Kurama no dijo nada —Espero que lo cuides.

—Lo haré, lo cuidare y protegeré tanto a él como al pequeño.

●●●●

Días después.

Poco a poco sus ojos azules se abren, una pequeña luz se filtra por la ventana, últimamente ha estado enfermo.

Voltea su atención, la puerta fue abierta, por ella un alto pelirrojo entra —Kurama.

—Cachorro —el mayor suspira de alivio —me has dado un susto pero tengo buenas noticias, — en sus labios  aparece una pequeña sonrisa —el pequeño cachorro ya está en el horno, estás embarazado.

Una gran sonrisa aparece en el pequeño rubio —Enserio —varias lágrimas bajas por sus mejillas —qué alegría, por fin tendré una familia, tendré algo mío.

El rubio al estar emocional no podía sentir que alguien más había entrado en la habitación, esta persona sonreía, su semilla dio frutos, un hijo en varios meses vendrá, tiene que ponerse las pilas, tiene que enamorar a su rubio, no puede perder está oportunidades.

—Felicidades, Naruto.

El rubio al escuchar su nombre se sorprende —Itachi — sólo puede sonreír tarde o temprano el se enterara que un hombre puede quedar embarazado —tengo que explicarte mi situación.

—No te preocupes por eso, kurama-sama lo hizo, entiendo tu condición, no estás solo también estoy yo para ti —dijo sincero, no quiero que su pequeño rubio piense mal de él.

Pero la sonrisa que aparece en Los bonitos labios del rubio valió cada palabra.

●●●● ●●●●

Hola, es corto aun así espero que le guste.

Una pregunta...

A comparación a antes, ¿le es más fácil para usted la lectura?

Por favor dejenme sus sugerencias para que así pueda seguir mejorando.


AdiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora