La mañana comenzó con una luz tenue filtrándose a través de las cortinas del pequeño apartamento de Jenna Hart. Se despertó temprano, aún con el recuerdo cálido del beso compartido con Shawn Mendes en su mente. Se estiró y, después de un breve vistazo a su celular, se dio cuenta de que Connor, el fotógrafo, había publicado las fotos de la tarde en el estudio en su cuenta de Instagram. La primera imagen era de ella, capturada en un momento espontáneo y natural, y en las siguientes se veía a Shawn en su entorno profesional, con una atmósfera que destacaba la conexión entre ellos.
Jenna sonrió al ver las fotos y, después de darle un "me gusta" a la publicación y dejar un corazón en los comentarios, decidió repostear la publicación en sus historias de Instagram. La simple y elegante historia capturaba un pedazo de su día especial, y sentía que era una forma agradable de compartir un poco de su mundo con sus seguidores. Luego, se preparó para su rutina matutina de ejercicio, esperando que el día continuara tan bien como había terminado la noche anterior.
Mientras se dedicaba a su sesión de ejercicios, su playlist de Spotify se interrumpió inesperadamente. Frunció el ceño, frustrada por la interrupción de su música, y tomó su celular con un gesto de fastidio. Pero su enojo se desvaneció instantáneamente cuando vio que la llamada era de Shawn. Contó hasta tres y respondió con una sonrisa en el rostro.
"¡Buenos días, Jenna!" dijo Shawn con un tono alegre al otro lado de la línea. "¿Cómo estás?"
"Buenos días, Shawn," respondió Jenna, su voz reflejando una mezcla de sorpresa y felicidad. "Estoy bien, gracias. ¿Y tú?"
"También bien," dijo Shawn. "Quería preguntarte si estaría bien para ti si comparto las fotos de ayer en mis historias de Instagram. Quiero asegurarme de que no te sientas incómoda con eso. ¿Qué opinas?"
Jenna se quedó en silencio por un momento. La pregunta de Shawn la tomó un poco desprevenida, y sintió una ligera presión. Se preguntaba si sería demasiado público o si podría complicar las cosas.
"Bueno..." comenzó Jenna, antes de ser interrumpida por Shawn.
"No quiero que te sientas presionada. Solo quiero asegurarme de que estés cómoda con ello," insistió Shawn con tono preocupado.
"Sí, está bien," respondió Jenna finalmente, sintiendo que no había razón para rechazar la oferta. "Puedes publicarlas."
"Genial," dijo Shawn, aliviado. "Te veo esta noche. ¿Te gustaría venir a mi casa esta tarde? Podemos pasar el día juntos, y luego, si quieres, podríamos ir a una discoteca."
Jenna sintió una oleada de emoción. "Me encantaría. ¿Cómo debería vestirme?"
"Vístete tan hermosa como ya eres," respondió Shawn con una sonrisa que se podía escuchar en su voz. "Te veo en un par de horas."
